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Los homicidios caen 15,6%, las rapiñas 32% y los hurtos un 19,7%

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Jorge Larrañaga puso énfasis en la defensa de los efectivos que están en la primera línea. Foto: Fernando Ponzetto

BRUSCO DESCENSO DE DELITOS

En los meses de marzo y abril bajaron los homicidios, las rapiñas, los hurtos y la violencia intrafamiliar, los delitos que más se denuncian según los expertos.

Para los expertos en el seguimiento de las estadísticas delictivas, se trata de una importante frenada en el crecimiento de los delitos más denunciados.

Las cifras, tomadas desde el comienzo del gobierno liderado por Luis Lacalle Pou, muestran un cambio en el espiral ascendente que se venía registrando desde hace una década. En ese período hubo subidas y bajadas en materia criminal pero, tomadas en conjunto, mostraron un crecimiento.

Entre los meses de marzo y abril se registró una importante caída en el número de cuatro delitos: homicidios, rapiñas, hurtos y violencia doméstica. Durante ese período ocurrieron 45 días de la emergencia sanitaria donde hubo un trabajo especial de los cuadros de la Policía mediante el nuevo despliegue y las tareas propias de la crisis por el COVID-19.

Los datos, a los que accedió El País y confirmó con jerarcas del Ministerio del Interior, señalan que los casos de homicidios cayeron un 15,63%, pasando de 32 casos en el mes de marzo a 27 en abril.

Durante los mismos meses, pero del año 2019, hubo 26 crímenes en ambos meses. En tanto, durante el 2018, año en que se produjo el récord histórico en homicidios, hubo 35 y 40 hechos respectivamente, según datos del Observatorio de Violencia y Criminalidad del Ministerio del Interior.

Mientras tanto, el delito que registró una mayor caída durante el segundo mes del nuevo gobierno fue la rapiña, bajando un 32,02%. En marzo hubo 2.817 denuncias y en abril un total de 1.915.

El año 2019 fue particularmente duro en materia de rapiñas, en marzo hubo 3.013 denuncias y en abril 2.449 en todos los departamentos.

Con relación a los hurtos, el descenso llegó a 19,73%, siendo 10.508 las denuncias durante el mes de marzo y 8.435 en abril.

Las autoridades se sorprendieron con una sensible caída en el número de denuncias por casos de violencia doméstica.

La reducción en este asunto fue de 16,33% entre marzo y abril. Hubo 3.203 denuncias y 2.680 respectivamente.

El dato sobre la caída en los niveles delictivos llegó a las autoridades del gobierno nacional que señalaron a El País la satisfacción por las cifras dado que “marcan el rumbo correcto de la política de seguridad”.

En el Ministerio del Interior atribuyen el resultado alcanzado “al mayor despliegue policial, el incremento del patrullaje, la flexibilización del PADO y la disposición de la totalidad de los recursos policiales en el combate al delito”.

Patrullero de policía de Montevideo. Foto: Gerardo Pérez
Patrullero de policía de Montevideo. Foto: Gerardo Pérez

Desde el comienzo de esta administración se anunció que las cifras de la actividad delictiva se darían a conocer oficialmente cada tres meses, lo que también es un cambio respecto a la gestión anterior que las presentaba una vez al año.

Proyección.

Ayer el ministro del Interior, Jorge Larrañaga, declaró en la comisión especial del Senado donde se estudia la ley de urgente consideración (LUC).

Allí el jerarca defendió una serie de artículos en los que se aplican cambios a la normativa de trabajo cotidiano de la Policía.

“El proyecto busca recuperar la autoridad y el orden”, afirmó Larrañaga. Además, marcó la diferencia de criterios que existe entre el gobierno y la gestión del Frente Amplio.

Aseguró que se busca “un cambio de paradigma” y que “durante los últimos tiempos se ha perdido respeto por la autoridad, se ha perdido respeto por el policía como soporte de la autoridad pública”.

El ministro puso énfasis en la defensa de los funcionarios policiales que se encuentran en la primera línea de lucha contra el delito. Advirtió que se viene de un tiempo en que la “presunción” era contraria a los representantes de la Policía.

“Ha habido una presunción política e ideológica contra la Policía. Una presunción en contra de quien ejerce la autoridad. Hay que decir las cosas por su nombre, en cada situación de duda, el que perdía era el policía. Y no se puede actuar así frente a quien detenta la representación del Estado y el uso legítimo de las armas en nombre y defensa de la sociedad. Hay que cuidar a los que nos cuidan”, afirmó Larrañaga.

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