El Poder Ejecutivo envió a la Suprema Corte de Justicia (SCJ) un informe de la Cruz Roja Internacional en el que se solicita evaluar la posibilidad de que cinco militares recluidos en Domingo Arena por violar los derechos humanos durante la dictadura, entre los que estaría José Gavazzo, terminen su condena en sus casas por “estrictos motivos de salud”, según informó ayer el semanario Búsqueda. El presidente José Mujica ha manifestado en reiteradas ocasiones que no quiere “tener viejos presos”. “Viejos de 75, 80 años. Pero no sólo los militares, ningún preso a esa edad. Que Dios me libre”, expresó. Ayer aclaró que se limitó a “tramitar” el pedido de la Cruz Roja.

Según la ley que establece medidas alternativas a la prisión, no pueden ser beneficiarios los presos que hayan sido procesados por violaciones a los derechos humanos. De acuerdo a lo que informó el semanario, cuando la SCJ reciba el informe desde el Poder Ejecutivo lo remitirá a los jueces de las causas de los ex militares implicados, para que evalúen cómo proceder. El ministro del Interior, Eduardo Bonomi, fue consultado ayer por la prensa y si bien confirmó la presencia de la Cruz Roja en la cárcel de Domingo Arena hace un mes, no dio detalles del informe por su “estricta confidencialidad”.

El vicepresidente de Madres y Familiares de Detenidos Desaparecidos, Óscar Urtasun, anunció que la organización se reunirá el lunes para decidir lineamientos a seguir, pero aseguró: “No creemos en los viejitos, creemos en los asesinos, y no le damos una súper importancia a la Cruz Roja porque cuando el pueblo la precisó, no estuvo, que fue cuando esos mismos viejos violaron la humanidad de muchos uruguayos. Mujica es lo que es, y ya ha dicho lo que piensa, pero no coincidimos”, indicó. A su vez, agregó: “No son viejitos lelos. Siguen manteniendo [la] misma rigidez conceptual [que durante la dictadura] y no denotan ni un poquito de arrepentimiento. No han colaborado en la búsqueda de verdad y justicia, y mucho menos en la de los desaparecidos”.

En marzo de 2010, enseguida de asumir la presidencia de la República, Mujica dijo que tiene una “visión humanista” y que por ello lo que interesa “es la verdad”. “Pero ¿las sociedades se bancan eso? Porque la Justicia tiene un hedor a venganza de la puta madre que lo parió. Y tengo la conciencia de que lo que pasé no me lo va a devolver nadie”, señaló.