No fue cualquier cumbre del Mercosur para el presidente José Mujica. Además de celebrarse en un día histórico para la región, fue homenajeado de pie durante un minuto por los presidentes y por todos los funcionarios presentes en la 47ª cumbre de jefes de Estado del bloque regional que se celebró en Paraná, Argentina. El aplauso lo motivó la presidenta brasileña Dilma Rousseff, cuando le agradeció a Mujica el “privilegio” de haberlo conocido y dijo que estaba emocionada por contar con su amistad. Mujica mantuvo durante la mayor parte del tiempo la mirada baja, se rascó una oreja, apretó sus lentes, hasta que Rousseff lo instó a saludar a las personas que lo aplaudían, y así lo hizo.

El presidente uruguayo propuso durante la cumbre que el puerto de aguas profundas que el gobierno proyecta construir en la costa de Rocha sea propiedad de todos los países de la Cuenca del Plata (Bolivia, Paraguay, Uruguay, Argentina y Brasil). Aseguró que ya habló del tema con el presidente electo Tabaré Vázquez y que en próximas instancias Uruguay aportará documentación para empezar a discutir el tema. Mujica señaló que pretende que el puerto “le sirva de punto de apoyo a todos los países de la región, para compartir, en una relación francamente igualitaria”. “No podemos estar discutiendo indefinidamente de zonas francas, de buhardillas que se ponen en la frontera y no de problemas de fondo que nos junten para siempre”, manifestó.

Tras su llegada a Montevideo, el presidente brindó una conferencia de prensa donde profundizó en su propuesta. Explicó que propone utilizar una figura jurídica “del tipo” de la utilizada en el caso de la represa binacional de Salto Grande, pero “más compleja, para simbolizar un puerto” regional. El presidente afirmó que “asegurar los intereses globales es la mejor manera de asegurar los intereses del país”, y que el puerto de aguas profundas “sólo con la economía uruguaya” no se justifica. Remarcó que puede constituirse en un polo de desarrollo y servirle a la zona de Matto Grosso Sur en Brasil, a Bolivia y a Paraguay, que tienen “una necesidad imperiosa” de canalizar sus cargas. Dijo que el acuerdo requerirá de trámites parlamentarios y que habrá una reunión en Montevideo especial para tratar este tema “con aportes de ingeniería y jurídicos”.

Durante la cumbre, los presidentes aprobaron el primer programa de integración productiva sectorial del Mercosur para la industria del sector de juguetes, ratificaron el interés del bloque regional en lograr “un acuerdo con la Unión Europea ambicioso, equilibrado y mutuamente beneficioso”, y destacaron el logro de una patente única y obligatoria -para todos los vehículos del Mercosur que sean registrados por primera vez a partir del 1º de enero de 2016- porque permitirá facilitar las actividades productivas y combatir los delitos transfronterizos.