El ministro de Defensa Nacional, Eleuterio Fernández Huidobro, que permanecerá en ese cargo tras la asunción de Tabaré Vázquez como presidente el 1º de marzo de 2015, dijo a la diaria que el contingente uruguayo en la Misión de Estabilización de Naciones Unidas en Haití (Minustah) quedará reducido a 250 militares. “Ahora vamos a quedar reducidos a unos 250 hombres, y de ese contingente ya está decidido su retorno. Es una operación complicada, porque hay que traer vehículos, etcétera, pero se va a estar produciendo sobre fin de año del año que viene”, explicó el ministro. Afirmó que la política de Uruguay respecto a las misiones de paz seguirá siendo coordinar acciones con la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) y que sólo “en casos muy extremos” se evaluarán retiros unilaterales.
Respecto a la operación en Haití, señaló que “hace tiempo” que se exige un “retiro paulatino”, porque “las misiones de paz se hacen para irse”. “Por suerte hemos estado en muchas que ya no están. Algunas son modélicas, como las de El Salvador o Guatemala, y la más recalcitrante es la del Congo, no la de Haití, porque la de Haití hace tiempo viene en repliegue”, afirmó el ministro. Sobre la misión del Congo, Fernández Huidobro dijo que el martes fue informado de que Naciones Unidas resolvió una reducción general de las tropas del 10%, aunque aclaró que no sabe qué tipo de fuerzas se replegarán ni tampoco qué porcentaje del retiro le corresponderá al contingente uruguayo.
En otro orden, consultado sobre la situación de sanidad militar, que ha sido un reclamo constante de las Fuerzas Armadas, Fernández Huidobro aseguró que el Hospital Militar está “pipí cucú” gracias a la gestión del actual equipo. “Yo entré al Ministerio de Defensa bajo la acusación de que venía a destruir Sanidad Militar, formulada por varios clubes [militares]”, aseguró. Dijo que ahora “está funcionando el IMAE cardiológico y sin el apoyo del Fondo Nacional de Recursos, que nos fue negado hasta hoy”, y que se tiene “el mejor horno crematorio del país”, pese a que “intereses muy raros y manos muy negras trancaron todo lo que pudieron” su concreción.