El ex candidato a la presidencia por el Partido Nacional, Luis Lacalle Pou, se reunió ayer con el senador líder de Alianza Nacional, Jorge Larrañaga, para “delinear una estrategia nacional en apoyo” a la campaña por las elecciones departamentales de 2015, informó el diputado Álvaro Delgado. Aún no se definieron los candidatos, pero aseguró que se “barajaron” algunos nombres y que elegirán entre los dos al de Montevideo. Sin embargo, Lacalle Pou dijo ayer a El Espectador que está claro “quiénes son los que tienen peso político real dentro del departamento”, aludiendo al 64,9% que obtuvo su sector en las elecciones internas de junio, sobre el 34,7% que alcanzó Larrañaga. “Hay un orden, y el candidato debe ser una persona que concite la mayor adhesión entre los convencionales que, de alguna manera, van a impulsar a ese candidato”, afirmó. Además, aclaró que le están “dando fuerza” al ex presidente de la Asociación Uruguaya de Fútbol, Sebastián Bauzá, que se perfila como uno de los posibles candidatos para Montevideo, pero que no manejó ese nombre en público.

Por el contrario, Delgado señaló que “la idea es que Larrañaga y Luis trabajen codo a codo en coordinación con los dirigentes locales para definir buenas estrategias, para que el partido retenga las intendencias que tiene y pueda conquistar alguna más”. Actualmente el PN tiene las intendencias de Cerro Largo, Soriano, Lavalleja, Durazno, Colonia, Flores, Florida, San José, Treinta y Tres, Tacuarembó, Río Negro y Paysandú.

Puñitos voladores

Lacalle Pou también habló sobre la rápida presentación del gabinete del presidente electo Tabaré Vázquez. “Recurre más a la confianza en el pasado que al desafío del futuro”, afirmó. “Uno podría olfatear” que “el gabinete iba a ser necesariamente monocromático”, agregó, y continuó: “Por eso en campaña hablábamos de gobierno de convicción y no de imposición, gobierno policromático y no monocromático. Pero son formas de entender el país y las dos están legítimamente sustentadas en la democracia; a algunos nos puede gustar más otra, nada más”. Por otro lado, dijo que “el diálogo con Vázquez” lo tiene “sin ningún prejuicio”, pero que espera que el presidente electo convoque a la oposición para trabajar sobre “temas puntuales y en los cuales el diálogo lleve a una modificación de la realidad de la gente y no quede en una muy linda foto de dirigentes políticos sonriendo, que después queda en nada y genera más frustración”. ■