“Si Rusia no toma inmediatamente las medidas oportunas [en relación al avión de pasajeros que cayó en suelo ucraniano el jueves], la Unión Europea [UE] establecerá las consecuencias en el Consejo de Exteriores que se celebrará el martes”, advertía ayer un comunicado de la cancillería francesa, enviado después de varias conversaciones telefónicas entre los gobernantes de Reino Unido, Alemania y Francia.

Estos países, así como Estados Unidos, sostienen que Rusia y los militantes pro rusos del este de Ucrania están interfiriendo con las operaciones para recuperar los cuerpos de las 298 personas que viajaban en el avión de Malaysia Airlines y tomar evidencias para conocer el motivo de su caída en la región de Donetsk, a unos 50 kilómetros de la frontera con Rusia.

Kiev difundió un audio en el que se escucha hablar a dos personas, que según el gobierno son el comandante del batallón de la zona en la que cayó el avión, Alexandr Jodokovski, y uno de los hombres a su cargo. La voz atribuida a Jodokovski le pide a la otra persona que se asegure de que las cajas negras del avión queden bajo su control, y agrega: “No es una petición mía, nos llega desde arriba, y con eso me refiero a Moscú”.

Tras la difusión de este audio, por YouTube, el gobierno ucraniano emitió un comunicado el sábado en el que acusó a los separatistas pro rusos de “intentar destruir, con el apoyo de Rusia, las pruebas de este crimen internacional”.

El líder de la autoproclamada República Popular de Donetsk, Alexandr Borodai, desmintió esas versiones y dijo que unos objetos “parecidos a unas cajas negras” están bajo su “supervisión personal”. Dijo que los entregará “a expertos internacionales, en caso de que éstos lleguen”.

No serán las autoridades ucranianas las que investiguen lo sucedido con el avión, que según los distintos gobiernos fue derribado por un misil, aunque esta hipótesis no fue verificada por técnicos. El viernes, países europeos y Rusia acordaron pedir una investigación internacional para aclarar lo sucedido, y ayer Australia presentó un proyecto en el Consejo de Seguridad para hacer de esas declaraciones de intenciones una resolución vinculante. Se prevé que sea votada hoy y que Rusia no utilizará su poder de veto en el organismo.

El domingo las autoridades de Kiev y los rebeldes llegaron a un acuerdo para retirar los cuerpos, en su mayoría de ciudadanos holandeses, cuyo gobierno exige su repatriación. Un grupo de enviados de la Organización de Seguridad y Cooperación de Europa confirmaron que las fuerzas separatistas llevaron los 196 cuerpos encontrados a tres vagones refrigerados para que no se descompongan. Los rebeldes de Donetsk dijeron que los cuerpos serán entregados a los expertos, cuando lleguen.