Después de muchos intentos de mediar para lograr un cese del fuego en Gaza, el secretario general de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Ban Ki-moon, y el secretario de Estado estadounidense, John Kerry, hicieron ayer su primer anuncio de un acuerdo entre Israel y Hamas, aunque se limita a una tregua humanitaria temporal, de 72 horas. En un comunicado, afirmaron que un representante de la ONU recibió “garantías de que todas las partes han acordado un alto el fuego incondicional y humanitario en Gaza”, y que la tregua “es fundamental para dar a civiles inocentes un respiro muy necesario de la violencia” y permitirles recibir ayuda humanitaria, atender a los heridos, enterrar a los muertos y abastecerse de alimentos.

Al igual que el miércoles, una escuela fue atacada ayer por fuerzas israelíes en Jahbalia, al norte de Gaza. Israel anunció que investigará lo ocurrido y señaló que Hamas podría ser responsable. La alta comisaria de Derechos Humanos de la ONU, Navi Pillay, dijo acerca de los reiterados ataques de este tipo que “ninguno de ellos parece accidental”. Por su parte, Ban afirmó: “Es una vergüenza. Es injustificable. Eso requiere que se rindan cuentas, eso requiere justicia”.

“Los derechos de los palestinos -niños incluidos- están siendo denegados a gran escala y es escalofriante”, dijo el vocero de la Agencia de la ONU para los Refugiados Palestinos en Oriente Próximo, Christopher Gunness, entrevistado por el canal qatarí Al Jazeera, y no pudo continuar porque se puso a llorar. Luego publicó el video en la red social Twitter, donde fue retuiteado casi 1.700 veces.

Varios países de América Latina mostraron su rechazo ante lo que sucede en Gaza, donde hasta ayer habían muerto 1.428 palestinos y otros 8.000 habían quedado heridos, según las autoridades sanitarias locales. Del bando israelí, la cifra de 56 soldados muertos y tres civiles se mantenía desde el miércoles.

Bolivia anunció que a partir de ahora considera a Israel como un “Estado terrorista” y que comenzará a exigir visado a sus ciudadanos. “Lamentablemente el gobierno de Israel no respeta las convenciones internacionales, los derechos humanos”, dijo el presidente Evo Morales. Por su parte, Venezuela anunció el envío de ayuda humanitaria como muestra de solidaridad con los civiles que están siendo “masacrados” en Gaza.

En un comunicado oficial, el gobierno argentino responsabilizó a Israel por la “integridad física” del sacerdote argentino Jorge Hernández, que tiene a su cargo en Gaza a 30 niños discapacitados. Exigió que su parroquia, la Sagrada Familia, “vuelva a contar con suministros de alimentos, electricidad y agua potable”, y advirtió que “el agravamiento de la situación de dichas personas tendría serias consecuencias en la relación bilateral”. Por esta ofensiva, Chile, Perú, El Salvador, Brasil y Ecuador llamaron a consultas a sus embajadores en Israel, y Costa Rica evaluaba ayer una medida similar. El gobierno de Chile consideró que “la escala e intensidad de las operaciones israelíes en Gaza” vulneran las “normas fundamentales del derecho internacional humanitario”.

Los países del Mercosur condenaron de manera “enérgica” el uso “desproporcionado” de la fuerza por parte de Israel, y ayer hubo un pronunciamiento específico de Uruguay, mientras que Paraguay hizo un “enérgico llamado para el cese inmediato a las agresiones y hostilidades” en Gaza.

Según la agencia de noticias Efe, la cancillería israelí respondió ayer que “habría sido mucho mejor” que estos países “se hubieran sumado a los esfuerzos internacionales para ayudar a Israel a defender a civiles inocentes, y conseguir un alto el fuego duradero que incluya la desmilitarización de Gaza”.