Funcionarios no médicos del Centro Hospitalario Pereira Rossell (CHPR) pararon sus actividades ayer entre las 6.00 y las 18.00; sólo se atendieron urgencias, emergencias y cirugías coordinadas. Poco antes del mediodía se concentraron a la entrada del hospital, con redoblantes, bombas brasileras y petardos, banderas y pancartas, mientras canciones como “A don José” y “Hasta siempre” se intercalaban con los planteos reivindicativos que sonaban por los parlantes.

Daniel Carrattini, presidente de la Comisión Interna, núcleo gremial de los funcionarios del CHPR, declaró a la diaria que el hospital pediátrico presenta una crisis asistencial por falta de personal, principalmente de auxiliares y licenciados en enfermería. “Los trabajadores presupuestados y los de Comisión de Apoyo se están fugando al sector privado por las malas condiciones laborales, están trabajando por encima de las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud, que es de ocho pacientes por trabajador”, afirmó.

En números, Carrattini expresó que “desde 2012 a la fecha tenemos una fuga de 60 trabajadores calificados en la atención pediátrica”. Comentó que la situación no mejora por la forma de contratación de la Administración de los Servicios de Salud del Estado (ASSE): se hace por el artículo 263 de la Ley de Rendición de Cuentas del ejercicio 2010, que habilitó a los directores a llenar vacantes temporales y permanentes, contratando personal en forma transitoria por hasta 180 días. El vocero detalló que mediante esa modalidad se contrata a la persona por seis meses y cuando cesa vuelve a contratársela por otros seis meses. La Comisión Interna del CHPR propone que “los contratos sean genuinos y brinden seguridad laboral”.

Mejor solos

A comienzos de mayo la Comisión Interna del CHPR había planteado a la FFSP la necesidad de movilizarse por la falta de personal. No recibieron el apoyo esperado y ayer concretaron la medida, amparados en su autonomía. En el volante que entregaron manifestaron su “repudio a las declaraciones reiteradas personales e inapropiadas de la compañera Beatriz Fajián”, que “con sus expresiones violenta la dignidad de los trabajadores”. Carrattini señaló que la dirigente “desde hace tiempo viene hablando de los trabajadores, primero con el episodio de los enfermeros asesinos y ahora con el tema de las colectas que quiere hacer y los descalificativos que usa para los trabajadores”. Rechazó “la forma despectiva que tiene al hablar de los enfermeros” y se desmarcó de la “protección” a dirigentes procesados por la Justicia.

Terapia intensiva

El área de CTI pediátrico es la que presenta mayor carencia de personal especializado. En diálogo con la diaria, Irene Rodríguez, presidenta de la Sociedad Uruguaya de Neonatología y Pediatría Intensiva, sostuvo que “sigue habiendo fuga de personal: la gente viene, se prepara y se va”. Expresó que no es tanto por los salarios sino por las condiciones laborales, para evitar el estrés: “Nunca saben cuál es la cantidad de gente con la que se va a contar”, dijo en relación a las vacantes y a la incapacidad de cubrir ausencias programadas, como licencias reglamentarias y por enfermedad.

Tanto Carrattini como Rodríguez afirmaron que el CTI pediátrico tiene 12 camas de sus 26 sin usar; la doctora agregó que en el área de recién nacidos también se redujo la atención. Comentó que faltan nurses y personal de enfermería.

Funcionarios de las áreas de emergencia y terapia intensiva expresaron que durante 2013 el CTI pediátrico apenas atendió a 40% de los niños que llegaron al hospital; el 60% fue derivado a centros privados, que cobran un promedio de 1.500 dólares por día por paciente. “El Círculo [Católico] habilitó cinco camas de CTI exclusivamente para vendernos servicios a nosotros, y nuestros compañeros se están yendo a trabajar a esas áreas”.

Estos temas no son recientes. En la Rendición de Cuentas del ejercicio 2012 ASSE creó el Programa de Fortalecimiento de Enfermería en Unidades de Cuidado Crítico Neonatal y Pediátrico. El organismo argumentó que el CHPR había gastado 48 millones de pesos durante 2012 en la contratación de CTI de otras instituciones y propuso crear una Unidad Docente Asistencial para formar personal de enfermería calificado en el CHPR, con el apoyo de la Facultad de Enfermería de la Universidad de la República.

Carrattini expresó que la Comisión Interna está de acuerdo con la implementación del programa, pero no con una de sus propuestas, mediante la cual ASSE contrató a 12 licenciadas en enfermería con una carga horaria de ocho horas diarias. El gremio reivindica la jornada laboral de seis horas y pide igualdad a la interna de todo el sector de enfermería.

Fuentes de ASSE explicaron que el organismo está en conversaciones con la Comisión Interna para intentar solucionar los problemas.

A punto de desbordarse

Carrattini señaló que la Comisión de Apoyo -que contrata personal en régimen de derecho privado en ASSE y el Ministerio de Salud Pública- incumple con los beneficios pactados en el grupo 20 de los Consejos de Salarios, entre ellos el pago por presentismo y antigüedad. Los trabajadores han entablado juicios y han ganado muchos de ellos, dijo Carrattini. Añadió que ASSE y la Comisión de Apoyo se niegan a contratar personal que haya hecho juicios, pero además ayer recibieron la notificación de que aquellos funcionarios que entablaron juicios y siguen en sus cargos, serán dados de baja en noviembre. Ocho de los 20 licenciados en enfermería que trabajan en el CTI pediátrico recibieron la notificación de despido, también otros dos que se desempeñan en la puerta de emergencia y dos del block quirúrgico.

Los trabajadores no recibieron respuesta de ASSE y hoy se reunirán con la agrupación minoritaria de la Federación de Funcionarios de Salud Pública (FFSP), la Lista 70, por el tema de los despidos.