Antes de que empezara la sesión ya se sabía que no estaban los votos para crear lo que sería la tercera universidad pública del país. En Diputados, el proyecto fue aprobado con los votos del FA y del sector del Partido Colorado (PC) Vamos Uruguay (VU). Sin embargo, en el Senado, esta suma no alcanzó, ya que los dos tercios son 21 senadores y el FA y VU llegaron a 19. El FA esperaba que Batllistas de Ley, que cuenta con dos senadores, apoyara la iniciativa, pero esto no fue así. El senador del PC José Amorín Batlle, que pertenece a ese sector, dijo que existe “un acuerdo en el sistema político” para crear la Uned, pero manifestó su discrepancia con la forma en que establece el cogobieno, ya que su propuesta es que haya un representante “de la sociedad” designado por el Poder Legislativo en el órgano de dirección de la Uned. Por su parte, el Partido Nacional (PN) tomó posición contraria al proyecto el año pasado. La informante fue la senadora del FA Lucía Topolansky (Movimiento de Participación Popular) que hizo gestiones hasta último momento para conseguir la mayoría especial. Luego de las exposiciones de senadores de todos los partidos con representación en el Senado, su presidente, Astori, puso a votación el proyecto “en general”, que obtuvo 17 votos en 25, y lo consideró “afirmativo”.

Sin embargo, el senador del PN Francisco Gallinal pidió una explicación a Astori sobre su criterio para calificar de afirmativa la votación de una “ley de estas características”, haciendo referencia a las mayorías que “la Constitución exige”. “El proceso de aprobación de un proyecto tiene una consideración en general y una en particular, al punto tal que incluso algunos colegas han opinado que la votación en general es para pasar a la votación en particular. Comparto que son dos componentes de la aprobación de una ley”, contestó Astori. Gallinal propuso entonces que el proyecto con aprobación “en general” fuera derivado a la Comisión de Educación y Cultura “para trabajarlo y alcanzar las mayorías necesarias”.

Luego, la bancada del FA pidió un cuarto intermedio y posteriormente el senador Enrique Rubio (Vertiente Artiguista) anunció que los senadores de su fuerza política entendían que “hay que ir por otro camino”. Rubio dijo que se iba a aprobar el proyecto con modificaciones, y que así volvería a Diputados, que “probablemente lo rechazará”. “Pasaría a la Asamblea General y quizá allí podamos encontrar el camino que hasta ahora no hemos encontrado. Pasar a comisión es un camino estéril, porque no hemos encontrado indicios de posibilidades de acuerdo”, afirmó Rubio.

Gallinal argumentó que el PN no compartía el criterio “de la mesa”. “No podemos aceptar que de un ente autónomo que no se creó, se defina cuál es el ámbito de competencia, cuáles son sus fines, los cometidos, qué títulos va a otorgar”, cuestionó. Después, Astori puso a consideración el articulado. El artículo 1° consiguió 17 votos en 25, y, por ser el que plantea la creación del ente autónomo, tuvo resultado “negativo”. Luego, y a pedido del senador colorado Ope Pasquet (VU), que votó el proyecto en general y la mayoría de los artículos, se desglosó el Capítulo II, que no votó.

Luego de la sesión, el PN emitió una declaración en la que expresa que “está a favor de fortalecer la formación docente, y en especial, de darle rango universitario”, pero que su posición fue “contraria al proyecto” tratado ayer en el Senado porque “propone un mal esquema de organización institucional, incapaz de darle al órgano de dirección la agilidad y flexibilidad necesaria para afrontar los retos actuales”. “Tampoco establece una estructura académica que permita construir un proyecto que vertebre las funciones universitarias de docencia, investigación y extensión de manera sólida y con alcance nacional”, continúa. La nota expresa que el PN intentó “buscar una solución consensuada entre todos los partidos políticos, formulando propuestas a nivel técnico, y se mostró dispuesto a negociar a nivel parlamentario, pero se enfrentó a una actitud del oficialismo que no dejó lugar a un diálogo constructivo que permitiera un acuerdo nacional” para la creación de la Uned. La declaración finaliza expresando que el PN “lamenta la intransigencia del gobierno, y su voluntad de hacer primar cuestiones ideológicas sobre legítimos intereses de los uruguayos” que terminaron “bloqueando esta iniciativa”.