Hasta el 28 de febrero 1,5 millones de usuarios del Fondo Nacional de Salud (Fonasa) están habilitados para cambiar de institución de salud. Este período, que se inició el 1º de febrero, se conoce popularmente como “corralito mutual”. Es la posibilidad de cambiar de prestador de salud, siempre que la persona cumpla con uno de los dos requisitos: tener al menos tres años de afiliación ininterrumpida a través del Fonasa a una misma institución de asistencia médica, o haber sido afiliada de oficio -porque al momento de registrarse en el Banco de Previsión Social (BPS) no optó por ninguna mutualista- durante el año en la Administración de los Servicios de Salud del Estado (ASSE).
Elena Clavell, responsable de la Dirección General del Sistema Nacional Integrado de Salud (SNIS), dijo a la diaria que hasta ahora se había cambiado 2,7% de los habilitados, y que los números son similares a los registrados en 2014, cuando a esta altura del mes lo había hecho 2,9% de los habilitados. Consultada sobre si se registró algún cambio llamativo respecto a algún prestador en particular, respondió que por el momento no hay “nada raro”. Según datos del BPS hasta ayer se habían cambiado 45.035 personas; en 2014 lo hizo 4,1% de los habilitados.
Dato a dato
La novedad de 2015 es que está disponible la aplicación atuservicio.uy que publica información sobre cada institución del SNIS a nivel nacional. Los datos relevados refieren a la cantidad de sedes, policlínicas y servicios de urgencia, los tiempos de espera para médicos y especialistas, satisfacción de los usuarios, disponibilidad de agenda y de medicamentos, información sobre derechos de los usuarios, recepción de quejas, costos de tickets y órdenes, cumplimiento de las metas asistenciales, cantidad de socios y de recursos humanos.
La aplicación fue desarrollada por la organización civil Datos Abiertos, Transparencia y Acceso a la Información (DATA) en alianza con el Ministerio de Salud Pública (MSP), en el marco del proceso del Gobierno Abierto impulsado por la Agencia para el Desarrollo del Gobierno de Gestión Electrónica y la Sociedad de la Información y del Conocimiento (Agesic). Clavell señaló que el proyecto está enmarcado dentro de los derechos de acceso a la información y valoró que a partir de él los usuarios pueden evaluar si los servicios se ajustan o no a las normativas propuestas por el MSP. Distinguió que la aplicación presenta la información “en un formato adecuado”. El formato es simple y se basa en software libre.
Clastornik subrayó que el proyecto “transforma datos públicos en datos abiertos”. Consideró que “transformar al Estado en infoproductor es complicado” y comentó que “los buenos ejemplos hay que difundirlos”. En ese sentido, indicó que “hay que hacer que nuevas instituciones adopten estas prácticas” porque son una “apropiación ciudadana”.
El antecedente de atuservicio.uy está en el corralito de 2014, cuando DATA y Portal 180 lanzaron una aplicación similar que fue elaborada a partir de la información publicada en la web del MSP. Esta vez se dio un paso más, porque el MSP fue una contraparte y “los equipos técnicos de DATA corrieron atrás de los equipos técnicos del MSP”, graficó Scrollini. En diálogo con la diaria, el investigador comentó que el proceso de trabajo (financiado por el MSP y el programa de pequeños apoyos de la Iniciativa Latinoamericana por los Datos Abiertos) duró seis meses y que lo más difícil fue recoger la información y sistematizarla.
La aplicación, además, da lugar a que el usuario tenga un rol más activo. Scrollini indicó que existe un feedback, porque comentarios hechos por los usuarios han forzado al MSP y a DATA a evaluar la información publicada, a modo de ejemplo, mencionó comentarios sobre “los tiempos de espera y avisos que brindan muchas mutualistas”. Señaló que este mecanismo llevará a “un cambio radical para los prestadores”, que “a lo mejor están acostumbrados a hacer publicidad y contar las cosas que a ellos les parecen adecuadas”. Dijo que ahora la información no será importante sólo porque la solicite el MSP, sino los propios usuarios. Hasta el momento han navegado 25.000 personas.
DATA aspira a continuar desarrollando la aplicación durante el año -la información puede servir para personas que cambien de prestador sin estar afiliadas mediante el Fonasa- y potenciarla para febrero de 2016. Pero además la propuesta busca ir más allá de fronteras: Scrollini dijo que se va a probar la iniciativa en el Estado de Sonora, México, y que se busca “promover un estándar a nivel internacional en materia de datos y servicios de salud”.