Probablemente el uruguayo Gerardo Matos Rodríguez y el argentino Pascual Contursi no adivinaron que, volviendo a su pasado, tantos se acordarían del dúo. Incluso cantores como Carlos Gardel y reconocidos directores de orquesta, como Juan d’Arienzo y Osvaldo Pugliese, sumaron a su repertorio, encantados, a “La cumparsita”.

Este himno popular y cultural de Uruguay -a partir de una ley aprobada en 1988- fue compuesto por el joven estudiante Gerardo Matos Rodríguez para “La Cumparsa”, grupo de carnaval formado por la Federación de Estudiantes Universitarios del Uruguay, si bien la primera vez que sonaron sus acordes fue en el café La Giralda en 1917 (no se sabe con exactitud la fecha de composición, que varía entre 1915 y 1916) por quien era entonces una de las máximas figuras del tango, el maestro Roberto Firpo.

La historia que le sigue ya es conocida: luego de unos años (en 1924) la compañía teatral del porteño Leopoldo Simari estrenó la pieza Un programa de Cabaret, original de Pascual Contursi y Enrique P Maroni, ya que en esa época era usual que en cada obra teatral se estrenaran tangos compuestos exclusivamente para ellas. Para esta ocasión, Pascual Contursi escribió una letra llamada “Si supieras” y la acopló a la música de un tango ya compuesto, sin autorización del compositor. El escogido fue nada menos que “La cumparsita”, y el tango resultó tan exitoso que motivó a Gardel a grabarlo rápidamente. Pero en el transcurso de los años, Matos había vendido su tango a la editorial Casa Breyer por sólo 20 pesos. Ante este éxito rotundo, el uruguayo inició una acción judicial para recuperar los derechos por haber realizado la venta siendo menor de edad. El juez le brindó un fallo favorable.

Como se ha reproducido en numerosas ocasiones, el ex ministro de Educación y Cultura Antonio Mercader, actuando como “comisario” del pabellón uruguayo en la Expo-Sevilla de 1992, eligió “La cumparsita” como tema musical. Cuando del pabellón argentino surgió una queja que llegó a la prensa, se organizó una polémica en un popular estudio radial andaluz: -“‘La cumparsita’ es un tango argentino”, defendían los opositores. - “¡No!, se equivoca, es uruguayo”, arremetía Mercader. “Pero la letra es del argentino Pascual Contursi”, respondían aquéllos. “Entonces toquen la letra...”, replicó Mercader, parafraseando a Matos Rodríguez.

En el marco de la Semana de “La cumparsita”, el viernes 10 de abril a las 21.00 en la sala principal del teatro Solís se presentará la Orquesta de Tango de la Ciudad de Montevideo. La dirección, los arreglos y el piano estarán a cargo de Álvaro Hagopián. En bandoneón, Néstor Vaz y Martín Pugin; en violín, Matías Craciun y Franco Locardi; y en contrabajo, de Charlie Cardozo. Omar Correa, Elena Vilariño, Estevan Cortez y Virginia Arzuaga integrarán el cuerpo de baile; las voces estarán a cargo de Ricardo Olivera y Natalia Bolani; y participarán los payadores Gabriel Luceno y Juan C López.

“‘La cumparsita’ es un ícono del tango en cualquier lugar del mundo”, dijo a la diaria Néstor Vaz. El bandoneonista, que tocaba desde niño este tango en diversos bailes, considera que se ha convertido en uno de los temas que más se reproducen, junto con algunos de Ástor Piazzolla y Carlos Gardel. “Es un tango mundialmente conocido, y lo bueno y destacable es que la autoría es de un uruguayo, lo que también afirma la existencia de una identidad uruguaya del género”, afirmó. Además, agregó que esta composición comparte el velo de misterio de varias cuestiones uruguayas, que alcanza incluso a la figura de Gardel o al enigma de cómo nació el tango.

Álvaro Hagopián se vinculó desde sus inicios con el género. No sólo fue pianista y arreglador de las Galas de tango de la Orquesta Filarmónica, sino que también ha integrado orquestas del género, ha tocado junto a importantes figuras, como el argentino Rubén Juárez o el uruguayo Gustavo Nocetti, y en la actualidad dirige un sexteto que lleva su nombre. Cuando Hagopián comenzó a estudiar dirección orquestal en la Escuela Universitaria de Música, en forma paralela integró orquestas de tango clásicas, a las que considera una escuela fundamental en su trayectoria.

En cuanto al lugar que representa “La cumparsita” en el repertorio tanguero, Hagopián asegura que es el tema del mundo del tango, y por eso mismo le llaman “el himno de los tangos”.

“Tiene esa magia especial -reflexiona Hagopián- con la que cuentan algunos temas, que los hace diferentes y únicos, incluso cuando no sean las mejores composiciones. Porque el propio Matos Rodríguez tiene muchísimas otras composiciones que, si se quiere, son superiores, pero ‘La cumparsita’ tiene esa particularidad que no comparte con ningún otro”. El concierto del viernes 10 incluirá un homenaje al tango -no sólo a “La cumparsita”-, realizando un racconto de distintos elementos, que abarcará desde el origen hasta la actualidad. “Empezaremos con los payadores y esos elementos camperos del género, hasta hablar de los boliches y homenajear a grandes figuras como [Aníbal] Troilo y [Horacio] Ferrer”, adelantó el pianista.