“¡Pará! ¡ Pará!”, gritó y cruzó la calle corriendo. “¡Pará!”, repitió y logró que el chofer de la línea 7 frenara el ómnibus. “¿Cómo andás, viejo? Acá la muchacha quiere ir al barrio Uruguay. Éste va para allá, ¿no?”, preguntó, se pasó el revés de la mano por la frente, y le indicó a la muchacha que subiera. “¡Chau, gurisa!”. El hombre transpirado que saludaba con la mano desde la vereda era uno de los candidatos a la Intendencia de Salto (IS) por el Movimiento de Participación Popular (MPP), del FA: Ramón Soto. Se quedó esperando a su mujer, que pocos minutos después lo pasaría a buscar en un Lifan rojo.

Soto fue al asentamiento Nuevo Caballero a escuchar los reclamos de los vecinos. Hace dos años que 35 familias formaron una cooperativa y construyeron allí sus casas, pero ahora quieren focos de luz, una policlínica y un centro comunal. Soto es médico rural, y su candidatura surgió desde las bases del MPP en Salto. Le dicen “el jefe”, y él, en otro ámbito, dice cosas así: “Las cosas no empiezan cuando venimos, ni terminan cuando nos vamos”; “es necesario ser humilde y saber que así como vine, me voy”. Y propone hacer hincapié en políticas sociales dirigidas al ámbito rural: “Señores de la ciudad, tienen que esperar un poquito más, porque acá está más jodido”; “tenemos que atender las primeras necesidades, después pensar en el turismo”.

Al mismo tiempo que Soto recorría Nuevo Caballero, en el barrio Uruguay estaba otro de los candidatos a la IS, del sector Vamos Uruguay (VU) del PC, el ex intendente y senador electo Germán Coutinho, que tenía programado un acto con micrófono, parlante, trompeta y redoblante. Y gente ajena al barrio, que llenó el lugar por un rato. Según aseguraron varios lugareños, el barrio Uruguay vota al FA. “Lo van a sacar a pedradas, mirá alrededor”, dijo uno de ellos. En todas las columnas de esa esquina había carteles del diputado Andrés Lima, el candidato a la IS por el FA con más chances de disputarle el sillón municipal a Coutinho. No volaron piedras, pero sí empujones y un par de piñazos. En pleno acto, mientras Coutinho les recordaba a los cientos que lo habían ido a escuchar que hay 40 listas que lo apoyan, y que su campaña es el reflejo de su “estilo de hacer las cosas”, “sin agresiones”, dos jóvenes frenteamplistas levantaron una pancarta que rezaba: “Bienvenido, Germán, por fin te vamos a conocer la cara después de cinco años”. Mientras el acto seguía, algunos colorados destrozaron el cartel e intentaron pegarles a los frenteamplistas, que se fueron corriendo. “Vinieron a desafiar”, aseguraron los militantes. Esto sucedió el viernes de noche.

Nuevo Caballero es tan oscuro como el barrio Uruguay, La Tablada y Los Ingleses. En este último barrio se celebró, simultáneamente al acto de Coutinho y la reunión de Soto, un acto de la lista departamental 888, Juventud Humanista Armando Aguirre -que llevó a Lima a la cámara baja-. Había unas 100 personas, panchos y Coca-Cola por 20 pesos. Lima llegó tarde, cerca de las 22.00, pero se mezcló entre el público y saludó a casi todos los presentes. Según contó, había viajado al interior del departamento para hacer campaña.

De ojos saltones y colorados, con las manos en la espalda, el diputado miraba atento a los oradores que hablaban de su virtuosismo e idoneidad para desarrollarse en el cargo de intendente. Lima se define como “un militante social haciendo política”, cuestión que responde a su catolicismo “perseverante”, según afirma.

El presentador del evento, Abel Rodríguez, aseguró que Lima presentó “más de 40 proyectos de ley”, que han sido encajonados por el FA por tratarse de una lista departamental. Sin embargo, en un estudio realizado por El Observador de cara a las elecciones nacionales, Lima figuraba como el único legislador de la cámara baja que no presentó ni un proyecto de ley durante el período 2010-2015. El diputado explicó que “desde que surgió la posibilidad de ser candidato, nos hemos dedicado más a la campaña”. Una campaña que se había proyectado junto al líder de Asamblea Uruguay (AU), Danilo Astori, pero que terminó ejecutándose junto al hoy vicepresidente de la República, Raúl Sendic. Astori denunció que la agrupación de Lima rompió el acuerdo programático con AU a cambio de dinero. “La situación existió”, afirmó el hoy ministro de Economía y Finanzas a El País, y aclaró que no le interesa la “polémica pública”. “Este tipo de actitudes le hacen mucho daño a la política uruguaya”, agregó.

Lima desmiente que haya habido plata de por medio y tiene otra versión de los hechos: “Consideramos que el caso de Sendic, que es joven y tiene una responsabilidad muy grande, nos identifica mejor”. Según dijo, se “sienten iguales en su manera de trabajo: sencilla, cercana con la población”. “Venimos trabajando bien”, afirmó.

Lima reconoce que la campaña está “peleada” y que será “difícil” recuperar la IS. “La perdimos por errores nuestros, pero el FA creció en comparación a las elecciones anteriores, y desde ese momento nos propusimos recuperar el gobierno”.

El tercer candidato a la IS del FA es Ramón Fonticiella, ex intendente de la comuna durante el período 2005-2010, perteneciente al Partido Demócrata Cristiano (PDC), que no se presentó en las internas y logró conseguir los convencionales que votaran su candidatura tras un acuerdo político con Lima. El viernes de tarde salió a entregar listas puerta a puerta por Talleres Sur. En dos manzanas entró a dos verdulerías, casas de familia, un taller de motos y otro de trabajo en aluminio y una panadería. “Esto no es una volanteada, es estar cuerpo a cuerpo con la gente”, aseguró. Pero el día de Fonticiella no empezó así. Empezó en la casa del PDC, ante cámaras de televisión y grabadores de los periodistas salteños: dio una conferencia de prensa para denunciar una “agresión”. El jueves de noche “el señor director de Recursos Humanos de la IS, Alberto Demora, agravió verbalmente a Gabriel Duarte”, el candidato a edil perteneciente a su sector, la lista 99738, tras participar en un programa de televisión. Según el ex intendente, “este hecho enluta la campaña”. Es algo “inédito” en democracia, acotó. “Los tiempos de patoterismo y dictadura han terminado”, añadió.

El PC también tiene otra candidata, Roxana González, que según Interconsult tiene 1%; el Partido Nacional (PN) alcanzaría 10% de la votación con su única candidata, Lucía Minutti.

Si no suma, resta

Es difícil conocer con exactitud la temperatura ambiente de Salto. Por un lado, la última encuesta de Interconsult indica que Coutinho será reelecto por amplia mayoría de votos, ya que tiene 39%. Por otro lado, está la tendencia creciente, y creencia de muchos, de que el FA suma votos constantemente. Según la mencionada consultora, Lima tiene 17% de la intención de voto en el departamento y Fonticiella le sigue con 16%. Eso al momento de preguntar a qué candidato votaría, pero si se pregunta a qué partido, el FA obtiene 40% y el PC mantiene los votos de Coutinho: 39%.

A partir de 1999, cada octubre el FA aumenta su votación, y desde 2004, y de forma ascendente, es el partido que logra la mejor votación en el departamento. En 2014 alcanzó 45.409 votos. El PN es el que más adeptos ha perdido, consecutivamente, desde 2004; el año pasado tuvo la votación más baja desde la década del 90, 19.659 votos. El PC logró casi 30.000 votos en las elecciones de 1999, pero tras el gobierno de Jorge Batlle y la crisis de 2002, ese número se convirtió en un anhelo: en 2004 lograron apenas 11.610 votos. En ese escenario, era casi seguro que la intendencia salteña pasaría a ser gobernada por el FA, y así fue. En 2005 el frenteamplista Fonticiella duplicó la votación del PC -30.685 votos frente a 16.687- y se sentó en el sillón municipal, pero la perdió en 2010 en manos del colorado Coutinho, por unos 2.000 votos.

Las elecciones nacionales de 2009 lo habían vaticinado: el PC sumó aproximadamente 8.000 votos, mientras que el FA logró añadir sólo unos 4.000. Pero la rueda giró, y en las últimas elecciones nacionales el FA marcó 45.409 votos, más del doble de lo que alcanzó el PC. Con este panorama, el ex intendente y candidato a la reelección colorado quiere que “la cosa” siga “más o menos” así. Que el comportamiento de los salteños se mantenga y profundice, que el presagio que ayuda a mantener la llama colorada encendida en el departamento se cumpla otra vez: que los salteños voten una cosa en las elecciones nacionales y otra bien distinta en las departamentales. En definitiva, desea que los blancos le sigan prestando votos al PC. “Los números no importan”, dijo el viernes tras salir del estudio de un programa de televisión salteño, pero en verdad sí.

Los caballitos de batalla

El de Coutinho es su gestión. “Ellos -refiriéndose al FA- estuvieron cinco años y no hicieron nada. Yo hice y es lo que estoy defendiendo en campaña; también estoy proponiendo”, aseguró. La bancada opositora de la Junta Departamental de Salto (JDS) y la Asociación de Empleados y Obreros Municipales de Salto (ADEOMS) tienen una versión diferente: ambas denuncian una “situación insostenible” en la IS.

Según explicó el dirigente de ADEOMS Juan Carlos Gómez, el Ejecutivo departamental no pudo pagar en fecha los sueldos de agosto de 2014 por falta de dinero, cuestión que se regularizó recién en marzo. Pese a la regularización, desde ese momento se atrasó el pago de los salarios vacacionales y de las pensiones. A su vez, los trabajadores de la intendencia tienen la línea de crédito cortada en el Banco República, en el Banco Hipotecario y en la cooperativa ANDA, porque la intendencia adeuda el dinero que se descuenta del salario de los empleados -las retenciones-. Gómez contó que la situación llevó a que denunciaran penalmente al ex intendente. Coutinho dice otra cosa, asegura que no tiene “ni una sola” denuncia penal. Explica que “históricamente las líneas de crédito han dependido de la voluntad de negociación de los bancos” y que siempre se pagó en tiempo y forma. “Nosotros logramos que los funcionarios que ganaban 4.000 pesos en la época de Fonticiella ahora ganen 30.000”, señaló.

A su vez, ADEOMS señaló que la “situación insostenible” también refiere al ingreso de entre 550 y 600 nuevos funcionarios a la IS, “los amigos de la vida” del intendente -dijo Gómez, parafraseando a Coutinho-.

La bancada frenteamplista también se suma al reclamo. La edila Nelly Rodríguez señaló que la administración del colorado pagó compensaciones “que no bajan de 30.000 pesos” y sobresueldos “que en algunos casos llegan a ser 80% más del sueldo”. Rodríguez señaló que el rubro cero equivale a 82% del presupuesto de la IS, y que el déficit asciende a los 1.000 millones de pesos. Según la última rendición de cuentas, el déficit pasó de 68,5 millones de pesos en 2010 a 585 millones de pesos en 2013. Al respecto, Coutinho aclaró que se trata de 600 personas que “fueron presupuestadas”. Era gente “que hace más de 20 años que estaba trabajando” para la IS. “Es una lucha histórica”, aseguró, y agregó: “Podemos comparar: en la administración de Fonticiella ingresaron 908 personas, 377 en la nuestra”. Respecto del déficit, se defendió: “mienten”. No recuerda la cifra exacta y remite a la lectura de la rendición de cuentas de 2013. “Es un déficit manejable. La IS es una de las empresas más viables del Uruguay”, aseguró, e identificó una de las causas del endeudamiento: “A mí me han obligado a trabajar al contado. Soy la única intendencia a la que el FA ha obligado a vivir al contado”. Puso un ejemplo: “Me exigen que hay que mejorar la calidad del servicio de ómnibus, pero cuando pido diez años para poder pagarlo me dicen que no. ¡Tengo que pagar 35 millones al contado!”.

Sin embargo, la explicación del ex intendente no concuerda con lo constatado por el Tribunal de Cuentas de la República (TCR) en la rendición de cuentas. La IS fue observada por el organismo porque cometió errores al presentar el resultado presupuestal de su ejercicio en 2012: registró como ingresos parte del pasivo.

Salto, inteligencia

La gestión de Coutinho también enfrenta críticas de la Oficina de Planeamiento y Presupuesto (OPP), dependiente de Presidencia de la República. El Fondo de Desarrollo del Interior (FDI), que está en el Área de Políticas Territoriales de la OPP y cofinancia proyectos de inversión junto a las intendencias, generalmente paga 85% de la inversión. Según la OPP, el programa de inversión de Salto es el que peor se ha ejecutado. Según informó el semanario Brecha en setiembre, en el “documento entregado en el Congreso de Intendentes de agosto de 2014, y otro de la Comisión Sectorial de Descentralización con fecha del 28 de agosto, de los 77,3 millones de pesos que la OPP le había destinado, el gobierno salteño sólo había ejecutado el 18%”, el registro más bajo de todas las intendencias. Brecha también alertaba que el plazo para ejecutar los fondos vencía el 31 de diciembre, pero la intendencia no había presentado proyectos a la Comisión sectorial de la OPP y perdería esos fondos. A esto se le suma el programa de caminería rural, financiado por la implementación del Impuesto al Patrimonio. Según se denunciaba en setiembre, Salto tenía para ese rubro 18,5 millones de pesos para 2014, pero hasta fines de agosto no se había ejecutado nada. Lo confirmado por Brecha en setiembre del año pasado es cotejado hoy por Nelly Rodríguez, que aseguró que el dinero que el gobierno nacional envió para caminería rural “no está”. “Se va en los sueldos”, afirmó. En cuanto al FDI, aseguró que esos fondos “se perdieron”.

El ex intendente tiene otra versión de los hechos. Sobre el FDI comentó: “ellos -por el FA- dijeron que se iban a perder 50 millones. No hablaron más de eso porque no fue así”. Aseguró que “en la caminería rural se volcó mucho más de lo que daban”. “Hay más y se hizo más, es la mejor caminería desde hace muchos años”. “Esto han sido temas de campañas para no tratar todas las obras que hemos hecho”, sostuvo.