El presidente colombiano, Juan Manuel Santos, advirtió que en cuatro meses se va a definir si sigue adelante el proceso de paz entre su gobierno y la guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC). Según el mandatario, el diálogo entró en una nueva etapa que puede llevar a un acuerdo definitivo o a un fracaso, si las FARC no cumplen con lo anunciado el domingo en La Habana. “Vamos a estar vigilantes”, dijo, y agregó: “En cuatro meses a partir de ahora, dependiendo de si las FARC cumplen, tomaré la decisión de si seguimos con el proceso o no”. Estas advertencias que hizo Santos a última hora del domingo llegaron después de que ese mismo día se anunciara un plan para reducir la intensidad del conflicto y agilizar las negociaciones para lograr un alto el fuego bilateral y definitivo. “Entiéndase bien: nuestras Fuerzas Armadas están listas para un gradual desescalamiento si las FARC cumplen. Si no cumplen, estarán listas para enfrentarlas con la determinación y contundencia con que siempre lo han hecho”, destacó.

Como señal alentadora, ayer militares y guerrilleros de las FARC iniciaron un plan piloto de desminado conjunto en el departamento de Antioquia, en el noroeste, según informó la agencia de noticias Efe. Esta iniciativa, que comenzó con la detonación de minas antipersonales unos 180 kilómetros al norte de la ciudad de Medellín, fue acordada en marzo en La Habana.