Al igual que el comediante Jerry Seinfeld, el ensayista Christopher Hitchens y el cineasta Lars von Trier, la escritora Anne Rice -autora, entre otras obras, de la exitosísima serie de libros sobre el vampiro Lestat- parece haberse hartado de las sistemáticas campañas en internet para estigmatizar a determinados autores por considerarlos discriminadores de minorías, por utilizar un lenguaje que identifican como discriminador o por escribir sobre grupos humanos a los que no pertenecen, es decir, la cada vez más evidente cacería moral y pública de quienes no convienen con lo “políticamente correcto”.

Rice, que nunca ha llamado la atención por su activismo social o político, escribió un extenso texto en su cuenta de Facebook, en el que, entre otras cosas, se lee lo siguiente: “Creo que estamos enfrentando una nueva era de censura, en nombre de la corrección política. Hay fuerzas activas en el mundo de los libros, que quieren controlar la ficción en términos de quién ‘tiene derecho’ a escribir sobre qué. Algunos incluso defienden la total censura de trabajos más viejos, que usan palabras que ahora parecen completamente inaceptables. Algunos critican las novelas que contengan violaciones. Algunos sostienen que los novelistas blancos no tienen derecho a escribir sobre gente de color y que los cristianos no deberían escribir novelas que involucren a judíos o que tengan una temática relacionada con los judíos. Yo creo que todo esto es peligroso. Creo que tenemos que defender la libertad de los escritores de ficción de escribir lo que quieran escribir, sin que importe cuán ofensivo pueda ser para otros. Tenemos que defender la ficción como un lugar donde las conductas e ideas transgresoras pueden ser exploradas. Tenemos que defender la libertad en las artes. Creo que tenemos que estar dispuestos a defender lo despreciado. Siempre es una opción personal comprar o leer un libro. Nadie puede obligarte a hacerlo. Pero las campañas en internet para destruir a autores acusados de desarrollar temáticas o actitudes inapropiadas son peligrosas para todos nosotros. Ésta es mi forma de ver este asunto. Ignoren lo que les parezca ofensivo. O hablen sobre eso con fundamentos. Pero no salgan a censurarlo o a destruir la carrera del autor ofensivo”.

Aunque varias de sus obras abordan una temática erótica y algo transgresora, Rice personalmente no ha sido víctima de esta clase de campañas, pero el texto parece haber sido motivado por las reacciones virulentas recibidas por la novela romántica For Such Time, de Kate Breslin, que narra la historia de amor entre una joven judía y uno de los jerarcas nazis del campo de concentración donde se encuentra recluida. For Such Time tuvo buenas reseñas previas, pero desató toda una serie de críticas feroces a causa de su historia central, considerada “ofensiva” por mucha gente apenas enterada del argumento básico del libro.