No son acertados los argumentos que esgrime Lopater cuando se refiere a que “los estudiantes” no participan en CFE porque “no están suficientemente representados”. Desde la creación de este Consejo directivo se establecen 5 consejeros en total (3 nombrados por el poder político, 1 docente y 1 estudiante). El argumento que sostiene el CEIPA, la Coordinación de Centros de Estudiantes de Formación en Educación, y el movimiento estudiantil en su conjunto (FEUU, CEEM), es la reivindicación histórica de los sectores populares en cuanto a la AUTONOMÍA Y COGOBIERNO REALES de la educación pública. Las condiciones actuales que pautan el funcionamiento del CFE responde a hacer trascender la política vertical del poder político de turno, generando pequeñísimos espacios de seudo participación, a una parte de los actores que constituimos la realidad educativa; ya que ni funcionarios, ni egresados tienen espacio en CFE. Por tanto, Lopater tiene que considerar que el CEIPA anhela participar en aquellos espacios que se propongan como realmente autónomos y con cogobierno de bases; no va a aceptar avalar políticas verticalistas conformando un somero acto participativo para llenar retinas.

Remarcamos a su vez que CEIPA y AEES Montevideo (Asociación de Estudiantes de Educación Social), no son los únicos gremios que se encuentran en conflicto. Hay que indicar que en lo que va de la lucha por presupusto digno y políticas educativas para la educación pública, CEM (Centro de Estudiantes de Magisterio) ocupó su instituto y se ha movilizado a la par de los gremios antedichos, y a la par de las movilizaciones y ocupaciones de Centros de Estudiantes de todo el interior del país de los CERP (Centro Regional de Profesorado) e IFD (Instituto de Formación Docente) de Maldonado, Colonia, Canelones, Tacuarembó, Río Negro, Artigas, Rivera, Durazno, Salto, Florida, San José, Treinta y Tres, Paysandú, etc.

Otro elemento a considerar con relevancia, es que CFE publica un documento denominado “Propuestas para la iniciativa de presupuesto 2015-2019”,donde se sostiene que se va a “Modificar el Plan de Estudios a partir de la evaluación del anterior y con una visión universitaria(...) promoviendo una amplia participación de los diversos actores y recogiendo la experiencia internacional en la materia...”. El CEIPA no ha sido convocado a ninguna instancia que nos ponga al tanto de estas cuestiones. Por ejemplo el día 3 de junio del presente año se realizó un taller sobre educación denominado “Diálogos a partir de las experiencias conocidas en la visita a países de América y de Europa” donde participaron el MEC (Ministerio de Educación y Cultura), el PNUD (Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo), la Unesco (Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura), y la AUCI (Agencia Uruguaya de Cooperación Internacional).En este tipo de ejemplos se evidencia que no existe una “promoción amplia de participación de los diversos actores”, esto es ya sabido desde el 2006, cuando se desconocieron por completo los emanados del Congreso Nacional de Educación “Julio Castro” y en otras múltiples instancias posteriores.

El estudiante del CEIPA no es altanero como señala Lopater, como para creerse que debe tener la potestad de dirigir la educación y ser mayoría. Simplemente quiere ser considerado y respetado dentro de un marco orgánico democrático, autónomo, cogobernado desde la base, gratuito, con presupuesto digno que responda a las necesidades existentes, tendiendo así a la construcción de políticas educativas con características emancipadoras, humanizadoras, en contraposición de un sistema educativo actual que responde estrictamente a los intereses funcionales del mercado, en desmedro de lo anterior; con un presupuesto insuficiente y financiando la empresa de la educación privada, exonerándola de impuestos por el concepto de considerarlas organizaciones sin fines de lucro, contribuyendo así con un proceso de privatización de la educación en los hechos, consensuando la pauperización del sistema de educación público, dejando sin posibilidades de educar en condiciones dignas a los sectores populares de la población.

El CEIPA continuará por el camino de la lucha, defendiendo los intereses de estos sectores.