La ocupación que los trabajadores del hospital geriátrico Piñeyro del Campo llevaban adelante hace 15 días se interrumpió el sábado a las 16.00, tras un decreto que el ministro de Trabajo y Seguridad Social, Ernesto Murro, firmó el viernes, y que declara el servicio esencial por 60 días. En la fundamentación se dice que tanto la Administración de los Servicios de Salud del Estado (ASSE) como el Ministerio de Salud (MS) solicitaron la esencialidad porque percibieron que en el centro “aparecen signos aptos de poner en riesgo la vida o la salud de los pacientes”, que hay “dificultades reales para monitorear la salud de pacientes graves”, que no hay servicio de limpieza porque la empresa a cargo no puede ingresar, por lo que el decreto se justifica por “la exclusiva finalidad de proteger el derecho humano a la salud”.

Los funcionarios del hospital, donde residen 207 pacientes, reclaman una bonificación jubilatoria por atender a personas con patologías psiquiátricas, que se destina a trabajadores que están bajo carga emocional y física, y contabiliza cuatro años de trabajo por cada tres. Además, piden un incentivo que corre hoy para empleados del Hospital Vilardebó y el Portal Amarillo. Según un informe que la dirección del hospital elaboró para el Banco de Previsión Social, cerca de 90% de los pacientes tiene alguna patología psiquiátrica. El hospital fue una de las primeras instituciones en integrar la Dirección de Salud Mental y Poblaciones Vulnerables de ASSE, pero sus trabajadores no reciben los mismos beneficios.

El decreto está “mal dictado”, opina Daniel Ríos, integrante de la Comisión Interna del hospital. Según adelantó a la diaria, los trabajadores consultarán hoy a un abogado para ver qué pueden hacer dentro del ámbito sindical para combatir el decreto. A su vez, presentarán un recurso de amparo ante el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social y una denuncia a la Organización Internacional del Trabajo, porque consideran que el decreto es inconstitucional: “Se decreta porque se dice que la vida de los pacientes está en riesgo, pero nosotros tenemos nueve inspecciones del MS, incluida una del día 14 a las 9.00, que dice que tenemos a todos los pacientes bien atendidos y en condiciones de higiene”. Según Ríos, el jueves les comunicaron que no hay intención política de negociar con ellos, por lo que están considerando iniciar una huelga de hambre.