El gobierno uruguayo manifestó ayer su “enérgica condena” a los atentados terroristas de ayer en Bruselas, que dejaron más de 30 muertos y 200 heridos (ver página 8), y expresó su solidaridad con las familias de las víctimas, así como con el gobierno y el pueblo de Bélgica. En un comunicado de prensa, el Ministerio de Relaciones Exteriores insistió en que “las respuestas a este flagelo internacional deben ser enérgicas, coordinadas y en el marco del Derecho Internacional”, y llamó a la comunidad internacional “a mantenerse unida para combatir este flagelo que cercena vidas inocentes y afecta principios y valores compartidos, como la libertad, la igualdad, el respeto a los derechos humanos y la fraternidad fundamentales para sostener la convivencia pacífica entre los seres humanos”.