La planta de celulosa que la empresa Botnia instaló en el departamento de Río Negro en 2007 -y que UPM, con capitales del mismo país, compró en 2009 por 2.400 millones de dólares- queda a cuatro kilómetros de la ciudad de Fray Bentos. Consume unos cuatro millones de metros cuadrados de madera de eucaliptus por año y genera 1.300.000 toneladas de pasta de celulosa por año. Pero no es lo único que sale de la planta: los fraybentinos tienen acumuladas varias denuncias de malos olores.

Dos reclamos en particular, uno en febrero y otro en marzo, llegaron a la Dirección Nacional del Medio Ambiente (Dinama); su director, Alejandro Nario, dijo el viernes que se resolvió aplicar a UPM una multa de 500 unidades reajustables (450.255 pesos) por los episodios de marzo, y tiene encaminada otra del mismo monto por los de febrero, contó a la diaria el jerarca.

Cada seis meses la Dinama inspecciona la planta, y una vez por mes toma muestras del río Uruguay. Los resultados, por ahora, son satisfactorios: Nario valora el desempeño ambiental de UPM como “muy bueno” y señala que los valores de fósforo en las aguas están dentro de los estándares exigidos, que según el jerarca están entre los más altos del mundo. Los olores en el aire de Fray Bentos en marzo se debieron a remodelaciones tecnológicas que la firma se había comprometido a implementar como una de las condiciones de gestión que impuso el gobierno para autorizar el aumento de la producción. El incidente olfativo fue inesperado, reconoció Nario, y no fue un caso de mala fe por parte de UPM. Ya instalada la tecnología, los valores de fósforo en el río Negro bajaron.

La multa, aclara el director de la Dinama, no se debe a la emisión de olores en sí misma, sino a que la empresa no comunicó antes a los vecinos y a la Intendencia de Río Negro que eso podría pasar. “Estamos trabajando con ellos [UPM] para que no se repita”, dijo Nario, y comentó que el episodio de febrero se debió a una operación de movimiento de lodos en las piscinas. El viernes la firma publicó en un comunicado que la situación fue “excepcional” pero que se cumplió con los protocolos. Sobre lo que no se pronunció la empresa es sobre las negociaciones sobre una tercera planta de celulosa en el país, un dato que La Juventud publicó el 15 de marzo y que Tabaré Aguerre, ministro de Ganadería, Agricultura y Pesca, reconoció. Nario dijo que a la Dinama no llegó ningún mensaje de parte de UPM, ni formal ni informal.