El Mercado Agrícola de Montevideo (MAM) fue el lugar elegido para la presentación de la “Agenda de diversidad sexual e igualdad social” para el quinquenio. Según explicaron las autoridades departamentales, optaron por salir la sede de la Intendencia de Montevideo (IM) para que la agenda en la que tienen especial interés las personas gays, bisexuales, trans e intersex (LGTBI) “salga del clóset”. El diagnóstico del que parte la agenda sostiene que “casi no existen datos sobre la calidad de vida de las personas LGTBI que viven en Montevideo”, y a partir de algunos trabajos puntuales surgen algunos indicadores, principalmente de la población trans, como que 70,4% de las mujeres trans de entre 15 y 29 años están vinculadas al comercio o la explotación sexual. Otro de los elementos que son parte del diagnóstico de la comuna es que los niveles educativos de la población trans están por debajo de los de la población en general.

Además, 62,2% de las personas trans de entre 15 y 29 años dicen haber sido discriminadas por pares durante su pasaje por la escuela, mientras que un quinto de las personas trans están en situación de calle. En materia de seguridad y violencia, 66% de las trans han sufrido algún episodio de violencia, que mayormente son agresiones en la vía pública. A nivel del resto de la sociedad, en una encuesta realizada en 2013, 22% respondió que no quisiera tener como parte de su familia a personas trans y 15% dijo que no quería tener a varones que tienen sexo con varones, porcentajes sólo superados por “personas que cometieron un delito” y “usuarios de drogas”.

Según el coordinador de la Secretaría de la Diversidad de la IM, Andrés Scagliola, la agenda es producto de varias instancias de diálogo con las organizaciones más representativas del movimiento LGTBI, y se rige bajo los principios de los derechos humanos, el reconocimiento de las “múltiples desigualdades que atraviesan” las personas y la necesidad del trabajo intersectorial, además de la descentralización y la participación ciudadana.

En línea

La agenda sigue cinco lineamientos, y uno de ellos es el que busca conocer más sobre la realidad de las personas LGTBI y superar la falta de información existente. Otra de las líneas de trabajo se plantea generar una política de no discriminación y de promoción de derechos, para no sólo responder ante situaciones puntuales. Para eso, por ejemplo, está planteado generar normativa departamental “antidiscriminación”, como la que contempla el derecho de acceso y permanencia en locales comerciales. Otra de las normativas que se busca cambiar es la del uso de baños públicos, para que haya un uso no discriminatorio por identidad de género, algo que, según Scagliola, se espera debatir públicamente el año que viene. Otro resultado esperado para el fin del quinquenio es un protocolo de derivación entre la red de policlínicas de la IM, y lograr que al menos cinco de estos centros de salud cuenten con “atención integral y descentralizada” a personas con VIH.

También se busca promover “una cultura respetuosa de la diversidad y la integración de la diversidad en la cultura”, para lo que se trabajará con la dependencia de la IM encabezada por Mariana Percovich. Según Scagliola, también se busca “descentralizar y territorializar” respuestas para lograr “que sea una causa de los 62 barrios de Montevideo”, además de la articulación con otros actores del Estado, como el resto de las intendencias departamentales. Para el jerarca se trata de “cerrar la brecha” entre la igualdad legal que se ha conseguido en los últimos años y la igualdad que se da en los hechos, que para las autoridades es necesario profundizar. Se busca, entonces, “pasar de la agenda de setiembre” -año a año declarado Mes de la Diversidad Sexual- a una “política sostenida”.

El jerarca explicó a la diaria que el 17 de mayo -Día Internacional contra la Homofobia- se presentará el inicio de un proceso mediante el cual se buscará convertir el MAM en un espacio “respetuoso de la diversidad”, modelo que después podrá replicarse en otras instituciones, como el teatro Solís, por ejemplo. Además, la secretaría trabaja con Acondicionamiento Urbano para “reformar a fondo” la Plazoleta de la Diversidad Sexual, en la Ciudad Vieja.