“En el sector de la construcción hay un abatimiento importante en los accidentes fatales”, dijo Gerardo Rey, inspector general del Trabajo y de la Seguridad Social, en la presentación de un informe sobre los repartidores en motocicleta o deliveries. Elaborado por el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social (MTSS), el estudio se presentó en el Día Mundial de la Seguridad y la Salud en el Trabajo. Es el resultado de una primera etapa de inspecciones a empresas y empleados de los rubros de comida y medicamentos de una profesión que, según la Encuesta de Hogares de 2014, tiene 1.400 trabajadores en la calle. Las conclusiones de este primer informe muestran que la formalidad es poca y los peligros son muchos.

La mayoría de la empresas fueron sancionadas, apunta el MTSS, y por motivos variados: tener empleados en negro, incumplir la normativa, no proveer ropa de trabajo. En inspecciones de 2015 a 74 empresas de Montevideo y 136 repartidores, el ministerio descubrió 28 firmas que no tenían planilla para controlar el trabajo, 24 que no habían presentado las altas al Banco de Previsión Social, 38 que no contaban con documentos que acreditaran pagos de salarios y 34 sin altas en el Banco de Seguros del Estado (BSE).

Es un trabajo “joven”: cuatro de cada diez deliveries tienen menos de 30 años, y otros cuatro, entre 30 y 45. A su vez, únicamente seis de cada diez se dedican sólo a eso. “Algunos tienen que hacer trabajos que les permitan llegar a más clientes, para tener un ingreso mejor”, sugirió Rey. 96% son dueños de sus motos y 76% reconocieron encargarse del mantenimiento del vehículo. Muchos -este informe no cita las cifras- no tenían el casco habilitado, y el inspector de Trabajo reconoció que hay “un cumplimiento escaso de algunas normativas de tránsito”, así como “mal estado de casco, chalecos y ropa de lluvia”. Otro elemento sería el estrés de los trabajadores, que para Rey se debe a un tránsito que se complejizó en los últimos años.

Según datos del BSE, los accidentes de los repartidores representan 2,5% del total de accidentes, y en el correr del año hubo, contando trabajadores formales e informales, ocho deliveries muertos, una cifra que preocupa al MTSS al contrastarla con los 14 de todo el año pasado. “Se trata de gente joven, y muchas veces es su primer trabajo”, agregó el ministro de Trabajo, Ernesto Murro. Los días que permanecen internados en CTI repartidores accidentados son diez veces más que los del resto de los trabajadores. 67% no ha tenido accidentes.

El MTSS propone trabajar en una serie de cursos en el segundo semestre del año, pensados en conjunto con la Federación Uruguaya de Empleados de Comercio y Servicios, el Centro de Almaceneros Minoristas, Baristas, Autoservicistas y Afines del Uruguay y las cámaras que representan a las farmacias. Además de capacitación en el trato con el público, incluiría subsidios parciales o totales para contenedores isotérmicos y cascos nuevos.