Desde la noche de ayer la delegación de Uruguay está en Filadelfia, ciudad en la que el jueves a las 20.30 el equipo de Óscar Washington Tabárez jugará su segundo partido en la Copa América Centenario ante la selección venezolana, que en su debut venció 1-0 a Jamaica y lidera junto a México el grupo C de la competencia.

Ayer aún en Phoenix, antes de emprender el viaje de cerca de cinco horas hasta la sede del partido del jueves, los celestes realizaron un entrenamiento que fue apenas un regenerativo para los que jugaron todo el partido contra los mexicanos, y una actividad más intensa para los que no lo hicieron.

No quedaron futbolistas lesionados tras la derrota 3-1 con los aztecas, pero sí está suspendido por doble amonestación el volante Matías Vecino, y todo apunta a que el Tata Álvaro González sea su reemplazante en el duelo con los venezolanos, teniendo en cuenta el buen desempeño que tuvo ante México cuando ingresó en el segundo tiempo.

Hoy, en el que será su primer entrenamiento en Filadelfia, el equipo llevará a cabo un ensayo táctico en el que empezará a asomarse la oncena para el jueves, que puede incluir alguna otra variante además de la previsible del Tata González por Vecino.

Además, el paso de las horas servirá para calmar los ánimos, que quedaron bastante agitados en todos los niveles de la delegación celeste luego de la derrota en el debut, ya que si bien la caída puede catalogarse como justa, estuvo marcada por algunos factores irritantes.

Además del impresentable episodio del himno antes del partido, los jugadores celestes reclamaron por una mano del mexicano Rafael Márquez en la jugada previa al segundo gol, y según el arquero Fernando Muslera, el línea paraguayo al que le reclamó por la omisión de dicha sanción, Milcíades Saldívar, se tomó los testículos y le contestó de manera socarrona. Pero además de los jugadores también se manifestó públicamente el presidente de la Asociación Uruguaya de Fútbol, Wilmar Valdez, quien ayer se mostró molesto con la organización del torneo.

“La Conmebol se equivocó en festejar un torneo de esta naturaleza, la copa más antigua del mundo, acá en Estados Unidos. Ayer [por el domingo] me quedó claro que este campeonato está armado para México. Hay una gran colonia mexicana, la cadena Univisión es mexicana. Lamentablemente, con mucho pesar y con mea culpa y asumiendo responsabilidades, digo que nos equivocamos y que la Conmebol se equivocó. Podrá ser una gran copa desde el marketing y el show, pero el fútbol sudamericano es otra cosa”, afirmó Valdez en declaraciones realizadas a Sport 890.