Con el partido que jugarán a las 16.00 (hora uruguaya) las selecciones de Polonia y Portugal en Marsella se pondrán en marcha los cuartos de final de la Eurocopa. Con el delantero Cristiano Ronaldo como estandarte, el equipo lusitano quiere seguir avanzando en la Euro, a pesar de que hasta el momento ha estado lejos de tener una buena actuación.

En la serie inicial los portugueses, que a priori eran los favoritos para quedarse con el primer puesto, finalizaron segundos tras conseguir tres empates. Luego, en los octavos de final lograron avanzar de fase luego de vencer en el alargue 1-0 a Croacia, en un partido ciertamente soporífero, de lo peor que se ha visto en el torneo.

Los polacos tienen como principal figura al delantero Robert Lewandowski, y si bien el goleador del Bayern Munich alemán hasta ahora no anotado en el certamen, igualmente se las han arreglado para seguir vivos en la competencia. Tras salir segundos por saldo de goles en el grupo en el que finalizaron primeros con 7 puntos junto a Alemania, en los octavos de final los polacos derrotaron por penales a Suiza, y hoy, si bien no son favoritos, perfectamente pueden dar el zarpazo y meterse en las semifinales.

El ganador de este partido tendrá como rival en las semifinales al vencedor del choque que jugarán mañana Bélgica y Gales, duelo en el que, en lo previo, los belgas parecen tener una luz de ventaja.

Pero los encuentros de hoy y mañana apenas serán una antesala del gran partido de los cuartos de final de la Euro, que será el clásico que disputarán Italia y Alemania el sábado de tarde en Burdeos. El gran choque entre las dos selecciones más laureadas del continente europeo pondrá frente a frente a los que mejor han jugado en el torneo.

Los italianos tienen a uno de los mejores arqueros del mundo, Gianluigi Buffon, figura en la victoria de cuartos de final sobre España, y delante de él juegan sus compañeros de Juventus Giorgio Chiellini y Leonardo Bonucci, que conforman una zaga sumamente efectiva. Pero más allá del valor que tienen dentro del equipo estos jugadores, los dirigidos por Antonio Conte no hacen un culto del catenaccio, sino que, más allá de no olvidar las raíces, tienen un juego dinámico y agresivo de la mitad de la cancha hacia adelante.

Alemania, vigente campeón mundial, en los octavos de final le ganó con facilidad a Eslovaquia 3-0, partido en el que quedó demostrado el enorme potencial de los germanos, que conservan la base de la formación que ganó el Mundial jugado en Brasil hace dos años.

Los cuartos de final se cerrarán el domingo con el duelo entre los franceses locales y la sorprendente selección de Islandia, que después de dejar fuera de combate a Inglaterra buscará prolongar su sueño europeo.