“Creo que es un gran equívoco y lo lamento. A la Federación Uruguaya de Magisterio [FUM] le pido mi perdón, no quise jamás ofender a los maestros”. “Si entienden que les entorpezco en algo, no tengo ningún problema en dar un paso al costado, porque no estoy prendida al cargo”. Con esas palabras, en declaraciones a Montevideo Portal, la ministra de Educación y Cultura, María Julia Muñoz, le pidió disculpas a la federación de maestros por sus dichos del jueves en una entrevista con Búsqueda, y otros posteriores en distintos medios. Al comparar a la actual directora de Educación, Rosita Angelo, con Juan Pedro Mir, quien ocupó ese cargo hasta octubre, Muñoz dijo en Búsqueda que a Angelo “le tienen muchísimo respeto al lado de un maestro de sexto año de escuela, como era Mir”.

A raíz de esas declaraciones, la FUM resolvió el viernes pedir la renuncia de la ministra. “Los calificativos usados por la Ministra nos producen indignación como docentes y como ciudadanos de un país que siempre ha apostado a una Educación Pública de calidad”, decía el Secretariado Ejecutivo de la organización en una declaración.

La FUM llegó a pedir la renuncia porque entiende que “no es la primera vez que sentimos esos agravios [de parte de Muñoz], que lo que hace es transmitir de fondo lo que ella siente por el magisterio”, explicó Elbia Pereira, secretaria general de la FUM, en referencia a la conflictividad que se vivió tras la declaración de la esencialidad en la educación el año pasado. Pereira también cuestionó otra declaración de la ministra: “Los que seguimos una carrera universitaria siempre recordamos muy bien a nuestras maestras”. “Transmite esa diferencia entre lo que es lo universitario y el magisterio. No es lo que espera el magisterio de las autoridades de la educación”, respondió Pereira.

La dirigente de los maestros valoró, igualmente, que Muñoz haya reconocido su error: “Está bueno que cuando alguien se equivoca, y tan feo como la ministra, pueda entender su error y disculparse, pero también entiendo que un error no se levanta con una disculpa; las acciones cotidianas deberían dar cuenta de su disculpa, el reconocimiento diario a los docentes”. Pereira también dijo que la ministra no fue clara al decir que daría un paso al costado si así lo pide la FUM: “El comunicado es claro, pedimos que renuncie, no pedimos que se disculpara”. Aseguró, de todos modos, que la FUM evaluará la respuesta.

Pablo Caggiani, consejero de Primaria y Educación Inicial electo por los docentes, consideró “inadmisible que la ministra de Educación hable así de los docentes, porque son señales complicadas para la sociedad en general y para los maestros”, y cuestionó que se esté discutiendo sobre estas declaraciones y no sobre “la priorización de los gastos en educación en la Rendición de Cuentas”. Los consejeros electos en representación docente analizaron el mensaje de la Rendición de Cuentas y destacan que, mientras se habla de diferir 793 millones de pesos del Presupuesto 2017 para la educación pública, en 2015 se aprobaron donaciones por 113 millones de pesos a escuelas y liceos públicos de gestión privada. “Uruguay les plantea a sus niños propuestas con un gasto diferente por alumno. Eso, por lo menos, no es equitativo. Quizá haya que afinar el lápiz y se pueda no diferir el gasto”, concluyó Caggiani.