El senador Luis Lacalle Pou, líder del sector mayoritario del Partido Nacional (PN), defendió la postura que tomó su colectividad política en las reunión interpartidaria sobre convivencia y seguridad ciudadana de ayer a la tarde. Según dijo, se trató de un planteo de “estricta lógica” que es “nada más ni nada menos de que se cumplan con los acuerdos”. Los blancos plantearon ayer que se aprueben los cinco proyectos de ley acordados en agosto, y mientras suspender las reuniones interpartidarias en la Torre Ejecutiva.

Lacalle Pou resaltó que ya van entre 19 y 20 reuniones (ayer el prosecretario de Presidencia, Juan Andrés Roballo, contó 12) y que “no se ha logrado ni un solo proyecto de ley”. “Si sigue el mismo equipo del ministerio y las mismas leyes es muy difícil cambiar la política de seguridad del país”, añadió. Luego, volvió a insistir con que no quiere que las reuniones sean “para la foto”, y se quejó de que el presidente “no puede asegurar que se cumpla el compromiso” de aprobar los proyectos de ley. Ayer Tabaré Vázquez respondió que el Poder Ejecutivo no podía obligar al Parlamento a obligar algo, mientras que los representantes del Frente Amplio declararon públicamente su compromiso en aprobar los proyectos de ley acordados en la comisión, pero con los tiempos que sea necesario en el Parlamento.

Por último, Lacalle Pou dijo que hay “dos mundos paralelos”: “el del presidente de la República en la Torre Ejecutiva y el del resto de los uruguayos, que reclaman por favor que se hagan cargo, que hagan algo porque esto no da para más”. “Yo quiero pertenecer al mundo de al gente. Mi vocación política es el mundo de la gente y no el del presidente”, finalizó. Ayer todos los partidos políticos rechazaron la propuesta del PN.