Hoy se jugará la vuelta de una de las semifinales, mientras que mañana se disputará la otra. San Pablo de Brasil, Atlético Nacional de Medellín, Independiente del Valle de Ecuador y Boca Juniors de Argentina: todos van por un lugar en la definición; hay sitio para dos.
A las 21.45 (hora uruguaya) en el estadio Atanasio Girardot de Medellín, Colombia, arrancará el fútbol entre colombianos y brasileños. La serie parece estar definitivamente encarrilada a favor de Atlético Nacional, que la semana pasada obtuvo una resonante victoria como visitante 2-0 en el estadio Morumbí de San Pablo. El equipo verdolaga paisa ha sido, en puntos y en juego, el mejor de la Copa Libertadores. Ganó su grupo holgadamente, fue el primero de los primeros y, salvo con Rosario Central, partido en el que sufrió hasta el final para pasar de fase, ganó con claridad las eliminatorias que le tocó disputar. Además, tiene un solo encuentro perdido como visitante y no perdió aún como local. Por todo esto y por el resultado adverso que tendrá que remontar, la misión parece ser muy dura para el equipo que dirige el argentino Edgardo Bauza, que de todos modos tiene armas colectivas y talento individual para intentarlo.
Mañana, también a las 21.45, se definirá el otro finalista de la Libertadores, cuando Boca reciba en la Bombonera porteña a Independiente del Valle, con la obligación de revertir el 2-1 favorable a los ecuatorianos que se registró en el primer encuentro de la serie, disputado la semana pasada en el estadio Atahualpa de Quito.
Es corta la diferencia y la llave está más que abierta. El gol de visitante que hizo Pablo Pérez en Ecuador puede ser el resorte que active la clasificación xeneize. Nada aparenta ser fácil. Los ecuatorianos ya dieron en la cancha numerosas muestras de ser un conjunto compacto, que se mueve en bloque, que cubre bien la cancha, y que además cuenta con dos goleadores encendidos: José Angulo y Junior Sornoza. Ambos llevan seis goles en lo que va de la Libertadores, y están a dos de los máximos anotadores del torneo: Marco Ruben (Rosario Central), Ismael Sosa (Pumas) -ambos ya eliminados- y Jonathan Calleri (San Pablo). Nicolás Lodeiro y Rodrigo Bentancur, ambos de Boca,y Cristian Núñez, Mario Rizotto, Emiliano Telechea y el entrenador del equipo ecuatoriano, Pablo Repetto, serán los representantes uruguayos en esta serie semifinal de la Libertadores.
En ambas llaves semifinales la definición es la que se lleva a cabo habitualmente. Se clasifica por puntos; de empatar, se tomará en cuenta la diferencia de goles; de persistir la igualdad en puntos y goles, se activará la opción de los goles de visitante; y, si aún no se dirime, se irá a la tanda por penales.
Las finales de la Libertadores están fijadas para los días 20 y 27 de julio. Si se clasifica Atlético Nacional de Medellín, por haber sido el mejor equipo de la fase de grupos, definirá la vuelta de la final como local. Si no pasa, y en su lugar van los paulistas, entonces el que salga triunfador de Boca o Independiente correrá con ese beneficio: los argentinos, por haber sido primeros de su grupo, mientras que San Pablo fue segundo de su serie; e Independiente porque, si bien también fue segundo de su grupo, como los paulistas, hizo 11 puntos, contra los 9 que alcanzó el equipo tricolor paulista.