El gobierno uruguayo quedó finalmente solo en su respeto a la normativa del Mercosur. Ayer el presidente argentino, Mauricio Macri, inclinó la balanza de la ambivalente posición argentina. “No estoy de acuerdo con que Venezuela asuma la presidencia del Mercosur. No cumplieron los requisitos hace cuatro años y terminó el tiempo para ejercer la presidencia. No es un miembro pleno”, manifestó.

Macri ya había dado algunos indicios en ese sentido cuando se reunió con Brasil y Paraguay para discutir la situación del Mercosur, el viernes en Río de Janeiro. El canciller uruguayo, Rodolfo Nin Novoa, dijo ayer en su comparecencia ante la comisión de Asuntos Internacionales de la Cámara de Diputados que se trató de una “reunión de cóctel”, sin poder de decisión, en alusión a que cualquier medida que tome el Mercosur deberá contar con el consenso de Uruguay. El diputado socialista Roberto Chiazzaro, integrante de la comisión, cuestionó el “viraje tremendo” que tuvo Argentina, y lo asoció a que la canciller argentina, Susana Malcorra, ya no tiene expectativas de ser electa secretaria general de las Naciones Unidas. “[Argentina] estaba acompañando a Uruguay porque Malcorra tenía expectativas de ser electa secretaria, y eso la hacía tener una actitud vacilante respecto de Venezuela, para conseguir sus votos”, sostuvo.

Respecto del argumento de que Venezuela no incorporó la normativa del Mercosur, Nin dijo en comisión que si bien es cierto que ese país se había comprometido a incorporar la normativa del bloque antes del 12 de agosto y no lo hizo completamente, también es cierto que ningún país del Mercosur ha incorporado toda la normativa. Además, el canciller hizo notar que solamente Paraguay comunicó verbalmente su interés en aplicarle la cláusula democrática a Venezuela, mientras que los demás guardaron silencio. Por otra parte, Uruguay no considera que deba aplicarse esa cláusula, porque entiende que no hay ruptura institucional en Venezuela, y ese fue el principal punto de discrepancia con la oposición ayer.

Por otra parte, el canciller uruguayo valoró que complica aun más la situación la circular que transmitió el gobierno de Brasil a sus sedes diplomáticas, instando a no participar en ninguna reunión del Mercosur convocada por Venezuela. En cambio, el Partido de los Trabajadores (PT) de Brasil emitió un comunicado la semana pasada en respaldo a la presidencia de Venezuela. “Las reglas de transmisión de la presidencia del Mercosur no exigen decisión consensual previa, así como siempre ha sido a lo largo de sus 25 años de existencia, al contrario de lo que quiere el canciller golpista [José] Serra en su empeño en agradar al imperio al vetar a Venezuela”, sostuvo el PT.

Chiazzaro explicó que la apuesta del gobierno uruguayo es “tratar por todos los medios de que el Mercosur siga funcionando”. “Van a seguir insistiendo en el cumplimiento de la normativa, y cuando Venezuela llame van a acudir a los llamados”, explicó el diputado.

La comisión conversó también con el canciller sobre el Tratado de Libre Comercio (TLC) próximo a firmarse con Chile. Nin explicó que será una modernización del Acuerdo de Complementación Económica entre ambos países en el marco de la Asociación Latinoamericana de Integración, y que además incorporará disciplinas nuevas.