El viernes hubo un giro importante en el relacionamiento entre la Federación Nacional de Profesores de Enseñanza Secundaria (Fenapes) y las autoridades del Consejo Directivo Central (Codicen) de la Administración Nacional de Educación Pública (ANEP), tras dos encuentros: uno de mañana, en la Dirección Nacional de Trabajo (Dinatra), y otro de tarde, en la Comisión de Legislación del Trabajo de la Cámara de Diputados.

Si bien Fenapes se había retirado de los ámbitos de negociación a fines de julio por considerar que las autoridades violaban la Ley de Negociación Colectiva y que no había garantías para la discusión, los dirigentes mantuvieron un ámbito que estaba acordado con el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social para discutir la extensión de la elección de horas por dos años, y estaba fijada una reunión en ese marco para el viernes. Pero a pedido del director nacional de Trabajo, Juan Castillo, se reencauzó dicho encuentro, según explicó a la diaria el dirigente de Fenapes Emiliano Mandacen: “Pidió un reperfilamiento de la reunión, para restablecer los ámbitos de negociación y continuar después con el tema elección de horas”. En esa cita finalmente se dio un “giro importante”, según Mandacen, cuando la consejera del Codicen Laura Motta, “en una actitud que saludamos, planteó que el Codicen era parte de la negociación y de la problemática”. Los dirigentes de Fenapes se quejaban de que el presidente del Codicen, Wilson Netto, planteaba que el organismo que dirige participaba como “invitado” en las negociaciones, cuando parte de los reclamos de Fenapes es que el Codicen “obstaculiza con órdenes verbales” los acuerdos alcanzados entre los docentes y el Consejo de Educación Secundaria (CES).

Antes de que Fenapes se levantara de las negociaciones, la Dinatra había propuesto firmar un acta de acuerdo entre las partes, que reafirmaba la vigencia del Estatuto del Funcionario Docente y, en particular, de aquellos artículos que habilitan la falta de docentes a clase por cursos de capacitación o reuniones de profesores y que, según Fenapes, se estaban violando por disposición del Codicen. También reafirmaba la vigencia de los fueros sindicales y el acuerdo entre el CES y Fenapes que flexibilizó la ordenanza sobre la permanencia de los alumnos en los centros educativos, una norma promovida por el Codicen para que los estudiantes no puedan salir del liceo cuando, por ejemplo, los docentes faltan a clase. En aquel momento la negociación se trancó porque Netto no quiso firmar dicho documento.

Tras el planteo de Motta, los dirigentes esperan ahora la próxima reunión, mañana, con “la expectativa de llegar a un acta de acuerdo con el Codicen y el CES para sortear este problema y empezar a discutir las problemáticas más estructurales”, indicó Mandacen. Respecto de los cambios para no perder horas de clase, Mandacen dijo que está de acuerdo con que se “aplique la normativa a los faltadores contumaces”, pero se quejó de que se “quiera cambiar la realidad a partir de elementos que no se pueden cumplir y después se quiera responsabilizar a los docentes por la falta de compromiso”. Puso como ejemplo la orden, impulsada por el Codicen, que prohíbe la realización de las reuniones de profesores en horario de clase, algo que dificulta la organización.

De tarde, ante los diputados, tanto los profesores como las autoridades dejaron constancia de “las profundas diferencias que existen, pero se reafirmó la continuidad de la negociación en la Dinatra. Antes no había ámbito de negociación, así que eso es bienvenido”, consideró el diputado Luis Puig (Frente Amplio), quien añadió que fue un encuentro “duro y bueno”. Mandacen también reconoció que en la comisión legislativa se alcanzó el compromiso, de ambas partes, para que “volvamos al espacio natural de negociación, que es el Ministerio de Trabajo”.

Paro, igual

Si bien las reuniones del viernes fueron auspiciosas respecto de que se retome la negociación, el sábado una asamblea general de delegados de Fenapes resolvió aprobar la convocatoria a un paro de 24 horas en las próximas semanas. Entre los motivos de la medida, más allá de que está presente el conflicto actual con las autoridades de secundaria y el Codicen, se incluye el recorte del presupuesto de la ANEP previsto en el proyecto de ley de Rendición de Cuentas que actualmente discute el Senado. “En Defensa de la Educación Pública: contra los recortes presupuestales en la ANEP y los procesos de mercantilización y privatización de y en la Educación Pública. En Defensa de las Libertades Sindicales: a un año del decreto de esencialidad seguimos reclamando el pleno respeto a nuestros derechos” es la plataforma del paro, que se realizará en coordinación con la Coordinadora de Sindicatos de la Enseñanza del Uruguay (CSEU). “Lo ideal”, según Mandacen, sería que fuera el mismo día que el paro general de 24 horas que aprobó la Mesa Representativa del PIT-CNT. La fecha del paro se determinará también mañana, en una reunión de coordinación de la CSEU, y los sindicatos quieren que sea antes de la votación de la Rendición de Cuentas en la cámara alta, prevista para mediados de setiembre.