La gran promesa del cine mexicano debutó como actor de largometrajes, junto a su compatriota Alejandro González Iñárritu como director, con la bellísima Amores perros *(2000). Continuó con otra gran película, *Y tu mamá también (2001), del también mexicano Alfonso Cuarón, que, además de sacudir al cine latinoamericano, demostró que en el país de Arturo Ripstein las cosas se estaban haciendo en serio. A esta altura, tras el Che de Diarios de motocicleta y el Ángel-Juan-Zahara de La mala educación (ambas de 2004), no es necesario explicar quién es Gael García Bernal, que será el primero en recibir el Premio al Cine Latino del Festival de San Sebastián, en la 64ª entrega de ese clásico encuentro cinematográfico, que este año se realizará del 16 al 24 de setiembre.

Ayer los organizadores de ese festival español (o vasco, si gustan) dieron a conocer la doble noticia: con la edición de este año comenzarán a distinguir a una personalidad destacada del cine latino y el elegido esta vez es García Bernal. “La creación de este premio marca un nuevo hito en la relación del festival con el mundo latino, estrecha aun más los lazos con su cinematografía y pone en valor el trabajo de nuestros cineastas”, dijo el director del certamen, José Luis Rebordinos. Para recibir este reconocimiento, el actor asistirá por cuarta vez al encuentro en San Sebastián, donde ya había presentado algunos de sus trabajos anteriores (Amores perros, Y tu mamá también y* Vidas privada*s, de 2001).

Entre los diversos papeles que ha interpretado el mexicano están el del cura que da nombre a la película El crimen del padre Amaro -2002, en su momento la película más taquillera de la historia del cine de su país-, que narra el trágico y fogoso encuentro entre ese personaje y una amada adolescente, y el de René Saavedra, el exitoso publicista que estuvo detrás de la campaña que derrotó en 1988 al general Augusto Pinochet, en No (2012), del chileno Pablo Larraín, director que el año pasado estrenó la premiada El club. Este año García Bernal volvió a trabajar con Larraín en Neruda, interpretando a Óscar Peluchonneau, el policía encargado de atrapar al poeta Pablo Neruda por la dictadura de Pinochet.