El Senado terminó de aprobar ayer el articulado del proyecto de Rendición de Cuentas que había votado favorablemente en general el martes, sólo con votos del Frente Amplio (FA) y que ahora pasará de nuevo a Diputados. El debate, que duró hasta las 23.00, tuvo algunos momentos de dura discusión, como cuando se trató el artículo 6, uno de los más importantes porque establece el abatimiento de gastos en el Sistema Nacional de Cuidados (SNC), el Instituto del Niño y Adolescente del Uruguay, y el Plan Ibirapitá, entre otros organismos. El nacionalista Álvaro Delgado calificó este artículo como el artículo “tijera” de la Rendición, mientras que el frenteamplista Yerú Pardiñas dijo preferir “la tijera a la motosierra”, en referencia a los ajustes fiscales realizados por el gobierno del presidente Luis Alberto Lacalle (1990-1995), y añadió, como ejemplo, que en los principales planes del SNC “no habrá disminución”.

También generó discusión la cantidad de funcionarios públicos. Desde el oficialismo se achacó el incremento a la regularización de becarios, pasantes y contratos a término heredados de los gobiernos de los partidos tradicionales, pero para el senador del Partido Colorado (PC) Pedro Bordaberry, durante los gobiernos del FA: “aumentaron los funcionarios públicos, aumentaron los funcionarios públicos encubiertos, porque sigue habiendo becarios, sigue habiendo pasantes y ni que hablar de las ONG [organizaciones no gubernamentales] compañeras”.

Otro de los temas que se extendieron en la discusión fue el inciso del Ministerio de Defensa Nacional, ya que el senador blanco Javier García expresó su preocupación por la situación presupuestal de las Fuerzas Armadas y advirtió que el país se encuentra “al borde de la indefensión”. El senador anunció que va a convocar al ministro de Defensa Nacional, Jorge Menéndez, para poder instalar en el Senado, en régimen de Comisión General, un debate que “nunca se ha dado” en profundidad sobre la situación de estas fuerzas. Varios senadores del FA, entre ellos Lucía Topolansky, le recordaron a García diversas instancias en que se había dado esa discusión. Por su parte, Bordaberry planteó que la reducción de los efectivos militares se viene haciendo desde 1985, y lo argumentó con cifras. “Si todos los gobiernos de todos los partidos aplicaron lo mismo, me supongo que es porque todos lo compartimos”, agregó. El senador del PC dijo además que entiende que hay que tener “aviones y barcos”, pero que se pregunta: “¿para qué tener tanques?”; “Cada vez que me cruzo uno en la carretera me lo pregunto. Si nos llega a invadir Brasil o Argentina duramos un rato... No porque no seamos valientes. En esos casos hay que salir a buscar a alguien que nos ayude”, y se refirió a la ocasión en que, a raíz del conflicto con Argentina por la instalación de la pastera UPM en Fray Bentos, el presidente Tabaré Vázquez había pensado en pedir ayuda a Estados Unidos. “¿Qué hace el hermano más chico cuando le pega el hermano más grande? Y bueno... Llama al papá”, remató Bordaberry.

Durante el tratamiento del inciso correspondiente al Ministerio de Transporte y Obras Públicas, el senador blanco Luis Alberto Heber se refirió a la “anterior administración” de esa cartera como “realmente desastrosa”, y alguien le acotó que el ex ministro Enrique Pintado estaba presente en sala, ahora como legislador. “Si está acá, no sé...”, expresó Heber blandiendo los lentes. Pintado no tardó en contestar la alusión: “Me quedo con tranquilidad, porque entre la opinión de algunos senadores y la de la ciudadanía, hay gobierno del FA para rato. No vamos a seguir en una especie de contencioso dialéctico que no conduce a ningún lado. La evaluación de la administración anterior ya la hizo la gente”.

Y si había un inciso en el que se esperaba debate era el correspondiente a la Administración Nacional de Educación Pública. El frenteamplista Roque Arregui arrancó criticando los argumentos de la oposición en la discusión del día anterior: “Direccionaron los datos como para decir ‘la educación está en un estado desastroso’ y se sacaron conclusiones de forma descontextualizada”. Por su parte, Heber se extendió denunciando los malos resultados educativos en comparación con otros países, el ausentismo docente, y hasta los recortes realizados al presupuesto del Instituto Nacional de Evaluación Educativa. Sin embargo, saludó el informe de gastos presentado en comisión por la Universidad Tecnológica: “Esto sí es manejar bien los recursos”. Como el martes, el debate también llegó al uso de las palabras, cuando Heber le cuestionó a Arregui el excesivo uso de la palabra “efectivizar”. “Me extraña de un maestro que use una palabra que no está en el diccionario de la Real Academia Española”, dijo Heber, mientras Arregui le gritaba apuntando con el índice: “Sí existe, sí existe”. Bordaberry defendió la reforma de Germán Rama como “la mejor” y dijo que el FA nunca la pudo “digerir” porque “no podía creer que Rama hiciera cosas con las que el FA estaba de acuerdo”. Sobre el final, se votó el artículo 190, también sólo con los votos del FA. Este establece que los donantes a las universidades privadas puedan deducir hasta 40% de los montos donados y no una quita total, como lo había resuelto Diputados. Después de la votación, el senador del FA Ernesto Agazzi preguntó qué haría el cuerpo “si mañana se instala una universidad musulmana en Montevideo”. “No sé, dejo la pregunta ahí”, agregó, y no recibió respuestas.