“¿Tienen alguna certeza?”, preguntó la diaria, y siguió un silencio. “No”, fue la respuesta de Federico Barrios, de la Federación de Obreros y Empleados Molineros y Afines (FOEMYA). La empresa Molino Dolores les anunció hace unos días que enviaría cerca de 300 trabajadores al seguro de paro. Así, sin más. Esta podría llegar a ser, si se concreta, la única certeza. Pero hasta el momento ningún trabajador fue enviado al seguro. Entonces, todo es “supuestamente”, porque los trabajadores tenían la versión de la empresa, y ahora los pocos datos que tienen son por medio de las autoridades, que están empezando a investigar el asunto. La nota de la empresa comunicando que enviaría esta semana a sus trabajadores al seguro de paro llegó al Ministerio de Trabajo y Seguridad Social (MTSS) el lunes.

Según publicó Agesor, la empresa Cereoil (una de las principales exportadoras de grano del país) se presentó a concurso de acreedores en setiembre de 2016 por deudas de más de 50 millones de dólares con bancos y proveedores privados. El pedido lo hizo una de las empresas accionistas minoritarias, la estadounidense Seaboard, que tiene 45% de las acciones. Los trabajadores se sienten en el medio de una disputa accionaria dentro de la empresa.

Dice Barrios: “Hace unos días la empresa nos comunica el envío al seguro de paro, diciendo que todas las cuentas de la empresa quedarían en embargo, inclusive la cuenta de los salarios. No entendimos para nada la situación, si sigue el concurso o no”. Como hasta ahora no se sabe nada de los envíos al seguro, los trabajadores piensan que quizá se pueda tratar de una medida de presión. Según le dijeron a la diaria varias fuentes, la empresa tendría una “deuda grande” con el Banco República (BROU). A su vez, la empresa tendría una cantidad de trigo cautiva por el BROU, por lo que debía comunicar en caso de que se vendiera. Sin embargo, se vendió y el banco no fue notificado. Siguiendo también a Agesor, Cereoil cuenta con líneas de crédito vigentes con instituciones financieras por 46 millones de dólares, con calificación 2A (deudor con capacidad de pago adecuada) y 2B (deudor con problemas potenciales). Según dicen los trabajadores, el empresario les dijo que era el BROU el que no atendía sus llamados, y las autoridades y el banco dicen lo contrario.

El titular del MTSS, Ernesto Murro, hizo las gestiones para que el BROU reciba hoy a la empresa, lo que se concretaría en la tarde. En el molino la situación “no está normal, porque se ha venido moliendo menos trigo ”, cuenta el sindicalista, pero tampoco está “caótica”: “Incluso hay exportaciones, y está entrando trigo en la empresa. Cuál fue el problema no sabemos, por ahora estamos laburando y no hemos tomado medidas, porque todo apunta a que la empresa va a seguir trabajando”. Hasta ahora, los trabajadores siguen cumpliendo sus funciones normalmente, aunque dice Barrios: “La verdad es que hemos perdido la confianza en la empresa, ya no le creemos nada”. Siempre que han hablado con el empresario lo han hecho por teléfono, porque hace tiempo que no va al molino. Les dijo “que tiene la documentación y que se quería reunir con ellos”, pero afirma Barrios que “hasta ahora ni aparecieron ni él ni la documentación”. Pero una certeza es que hoy de mañana, a eso de las 11.00, habrá una reunión entre la empresa, si es que va, la Dirección Nacional de Trabajo y los trabajadores. Castillo dice que la reunión es fundamental “para tener la información arriba de la mesa” antes de comenzar a buscar posibles salidas. Y pregunta: “¿Te imaginás lo que significa que después de todo lo que le pasó a Dolores cierre su principal industria o envíe a todos sus trabajadores al seguro de paro? Es una conmoción social”.