La ministra de Turismo, Liliam Kechichián, dijo a FM Gente, de Maldonado, que “hay que pelear para que esta fiesta siga estando en Uruguay”. En diálogo con la diaria, explicó que con “pelear” se refería a que “todos los organismos involucrados en el tema debemos trabajar para que esa fiesta se siga haciendo aquí”. Para la ministra, el episodio fue “triste”, en la medida en que “el organismo regulador de las cuestiones ambientales en toda la costa uruguaya es la Dinama [Dirección Nacional de Medio Ambiente] y efectivamente no se la tuvo en cuenta”, cuando “debería haber sido consultada desde el primer momento”. Según Kechichián, “la empresa manifestó que no sabía que había que pedir autorización a la Dinama. La ministra cree que la empresa ha mostrado una “muy buena actitud”, ha “reconocido cierto daño” y “está trabajando para repararlo”.

En el Ministerio de Turismo (Mintur) se considera que estas fiestas son “muy importantes”, en la medida en que “posicionan al destino, se transmiten a todo el mundo y hace muchos años que se hacen”, por lo que quieren que se mantengan en Uruguay y en Punta del Este. El Mintur tampoco participó en las reuniones, ya que, según Kechichián “no tiene ninguna potestad”, en tanto “es un evento departamental, por lo que la intendencia es la que coordina y sus direcciones son las que participan”. Sin embargo, la ministra dijo que, “obviamente, cuando se afecta un espacio público que tiene un control nacional, como en este caso la franja costera, los organismos nacionales tienen que ser escuchados”. Consultada por la diaria acerca de si el Mintur cree que pueden construirse criterios comunes para la realización de estas fiestas a nivel nacional, Kechichián dijo que “es imposible pensarlas a nivel nacional”, porque “cada intendencia tiene sus propias reglamentaciones y tiene autonomía”. Esta fiesta, dijo, fue “un aprendizaje para todas las partes”, y “dejó claro que a la Dinama hay que escucharla y coordinar con ella”.