Dos maniobras individuales le bastaron al equipo de Raúl Möller para llevarse tres enormes puntos en su visita al Parque Viera ayer por la tarde. Con eficacia y buen criterio, El Tanque aprovechó las que tuvo y controló bien las arremetidas bohemias para sellar un gran triunfo. El sanducero Miguel Merentiel fue determinante y en las que tuvo no perdonó. El manual dice claramente que primero hay que convertir para no pasar zozobras. En el primer tiempo el dominio local fue absoluto y las chances estuvieron. En 15 minutos de juego apareció flor de bombazo del lateral Mauricio Gómez, tras combinar con Sergio Blanco, que se estrelló en el travesaño. Enseguida Wanderers tuvo otra oportunidad tras un tiro de esquina y el arquero Gonzalo Salgueiro la despejó con el pie. Por si fuera poco, Matías Santos tuvo una más, en combinación con Cristian Palacios, y otra vez dio en el palo. No quería entrar.

El floridense Jorge Giordano plantó un 4-1-3-2, que por momentos tenía muy libre a Ignacio Gónzalez. Esta vez los circuitos de juego no fueron tan efectivos como en la victoria ante Racing de la semana pasada, pero el bohemio se las ingenió para ser peligroso. El equipo fusionado, con un 4-3-1-2, logró equilibrar el juego cerca del final con dos avisos de Miguel Merentiel. Primero el delantero tuvo una opción inmejorable, tras ir mano a mano con Martín Rodríguez, y definió tras tres enganches. Mauricio Gómez fue quien tapó el arco. La otra chance vino con un lindo remate del jugador cedido a préstamo de Peñarol, que atajó el guardameta bohemio.

El pescado se vendió todo en el complemento con la gran tarde de Merentiel. Desde el vestuario el delantero tuvo la primera, y, tras una gran maniobra personal, la pudrió en el ángulo. Todo Wanderers protestó una falta en el inicio de la jugada. Pero lo peor vino al instante, cuando Gastón Bueno recibió la segunda amarilla y dejó a su equipo con diez. Ese trámite condicionó la jornada y otra vez el hombre de la tarde puso el segundo tanto para el equipo fusionado. Esta vez Merentiel recibió en posición dudosa, pero definió notablemente ante la salida de Rodríguez y puso el 2-0.

A pesar de los intentos y de los cambios de sistema, Wanderers no se pudo acomodar y generó peligro. El equipo de Möller estuvo firme hasta el final, pero no logró dar la cachetada última. Recién en la hora Wanderers pudo achicar con el gol de Matías Santos, el cual no sirvió de mucho.