Pese a que derrotó 1-0 a Fluminense de Brasil en el Centenario, Liverpool quedó eliminado de la Copa Sudamericana al caer en el marcador global de la serie 2-1. Los negriazules jugaron un gran primer tiempo, en el que fueron claros dominadores. Tempranamente, a los 12 minutos, se pusieron adelante en el marcador con un gol del delantero Juan Ignacio Ramírez, luego de un notable desborde y una gran asistencia de Nicolás Royón. La intensa presión en la salida ejercida por los de Belvedere complicó muchísimo a los brasileños, que la pasaron realmente mal, sobre todo durante los primeros 30 minutos de juego. Luego de eso, Liverpool sintió el desgaste realizado en la parte inicial y en el segundo tiempo el Flu dominó totalmente el juego: lo que impidió que lograra el empate fue la notable noche del arquero Guillermo de Amores, que con sus atajadas mantuvo viva la ilusión de su equipo hasta el final del partido. Pero el ansiado segundo gol, que podría haber llevado a la definición de la serie por penales, nunca llegó, y el camino sudamericano negriazul llegó tempranamente a su fin.