A tres meses de las elecciones en Alemania, la canciller, Angela Merkel, anunció que dará libertad de voto a los diputados de su partido –la conservadora Unión Cristianodemócrata (CDU)– en el debate parlamentario sobre el matrimonio homosexual. “Deseo orientar el debate hacia una situación en la que sea una cuestión de conciencia, en vez de una imposición”, dijo Merkel el lunes.

La discusión en el Parlamento podría tener lugar esta misma semana, a pedido del Partido Socialdemócrata (SPD), actual aliado en el gobierno pero rival en los próximos comicios, que busca sumar puntos en plena campaña. El matrimonio entre personas del mismo sexo quedó fuera del acuerdo de coalición firmado en 2013 entre la CDU y el SPD, y los socialdemócratas habían respetado hasta ahora esa decisión. Ayer, sin embargo, consiguieron que la comisión de asuntos jurídicos del Parlamento aprobara el debate sobre el tema para los próximos días.

Todos los partidos alemanes incluyen este proyecto en sus programas, excepto el de Merkel, su ala bávara –la Unión Socialcristiana– y los ultraderechistas de Alternativa para Alemania.

El SPD cuenta con el apoyo del Partido Verde y de La Izquierda, por lo que la iniciativa tiene la mayoría parlamentaria garantizada. Además, es posible que se sumen diputados conservadores que no comparten la posición oficial de la CDU, contraria al proyecto.