Ayer se cumplió un nuevo paro general de 24 horas convocado por el PIT-CNT. De mañana, las calles de Montevideo se veían un poco más vacías que de costumbre. Había menos vehículos circulando y algunos comercios mantuvieron sus cortinas bajas. En la sede del PIT-CNT, en la calle Jackson, una caravana de ómnibus de cooperativas hicieron sonar sus bocinas minutos antes de que empezara el acto de la central sindical. Pasadas las 11.00 empezó: los principales oradores fueron Fernando Pereira, presidente del PIT-CNT y Marcelo Abdala, secretario general.

Pereira calificó la jornada de ayer de “día de lucha” y “movilización”, mientras que Abdala dijo que fue un “sacudón de la escena nacional”.

El presidente de la central aseguró a la diaria que la plataforma de ayer fue más compleja que una reivindicación salarial o la lucha por mejores condiciones laborales. “El estancamiento trae retroceso”, decía el eslogan, y se refería a todas las leyes que el PIT-CNT cree necesario aprobar y están pendientes en el Parlamento; además, destacó la falta de tiempo de negociación en el sector público para el proyecto de ley de Rendición de Cuentas. Según dijo, se debería haber convocado a los sindicatos en marzo para que, cuando llegue la Rendición de Cuentas, se pueda abordar la totalidad de los temas. En su discurso, Pereira preguntó, en forma retórica, si el presupuesto para la educación es suficiente para asegurar su calidad. “El trabajo está íntimamente ligado a los niveles de capacitación. ¿No habría que construir mayores recursos para atender los salarios de los maestros, los profesores y los funcionarios?”, preguntó. Dijo además que hay un conjunto de leyes que tienen la aprobación en una de las cámaras pero están trancadas en la otra, o que no se reglamentaron. Como ejemplo puso la ley de empleo para las personas con alguna discapacidad. “Esta ley la hemos impulsado en todos lados”. Aseguró que recibieron amplio apoyo de toda la sociedad y tuvo media sanción en Diputados, por lo que “la pregunta es: ¿por qué está trancado algo que tanto bien les haría a uruguayos?”.

El PIT-CNT pide que se reglamente el convenio 158 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), que “fue votado por unanimidad en la Cámara de Diputados. [El convenio] plantea que no se puede despedir a nadie sin causa justificada. Es algo compartido por la sociedad; entonces, ¿por qué no se reglamenta?”.

Pereira aclaró que el PIT-CNT no está comparando al gobierno actual con uno “neoliberal”. “Ni Dios permita”, dijo. El presidente de la central sindical hizo una referencia indirecta al ex presidente Julio María Sanguinetti: “No estamos comparando nada con aquel que decía que no había perdido nunca ninguna huelga. Lo que decimos es que no hemos logrado avanzar”.

Otra ley que reclaman es la de nocturnidad, “lo que incluye sin duda a los policías, que son trabajadores igual que nosotros”. Pereira recordó la muerte del policía Wilson Coronel, que falleció en una rapiña mientras cuidaba una pizzería en la modalidad de “223”. “Hay que discutir esa realidad, porque existe y habrá que buscar la mejor solución”.

En conferencia de prensa aseguró que “nadie debería morir por trabajar. Todos tenemos que internalizar que un policía es un trabajador de la seguridad, por lo tanto hay que asegurarle todas las garantías”.

Otra de las reivindicaciones es que “se conforme una ley de insolvencia patronal para que cubra a los trabajadores cuando una empresa cierra o cuando [un empresario] cambia de negocio. Este fondo serviría para cubrir salarios no pagos, horas extras, aguinaldo, el salario vacacional, la licencia y el despido. Probablemente en las empresas más grandes se llegue a cobrar más tarde, pero en las empresas de pequeño o mediano porte casi nunca se logra cobrar”.

La central también reclama que las empresas proveedoras de distintos insumos para la nueva planta de UPM, en caso de que se instale, sean uruguayas.

El dirigente sindical dijo que el acatamiento al paro de ayer fue amplio. Sobre el transporte aseguró que “todos los trabajadores son huelguistas. Cuando termine el horario de emergencia no va a haber ningún ómnibus”, ya que los que salieron a manejar fueron los dueños, explicó: “CUTCSA y otras empresas colocan coches de emergencia manejados por los empresarios”.

“Varios compañeros hemos recorrido las calles de Montevideo en las primeras horas de la mañana y podemos decir, con certeza, que decenas de miles de trabajadores han adherido a la medida del movimiento sindical de manera libre y voluntaria. Sin presión de ningún tipo, con la convicción de que si su sindicato los convoca, ellos paran”. Pereira aseguró que la calle estaba “llenita” de ómnibus, “pero iban sin trabajadores, y eso es un apoyo a la plataforma del movimiento sindical”. Abdala, por su parte, dijo que se los critica por “una presunta falta de independencia con respecto a los partidos políticos y, en particular, al Estado gobernado por el Frente Amplio. Creo que en el día de hoy esta es una demostración muy clara del nivel de autonomía con el que adoptamos nuestras decisiones”.

El dirigente aseguró que en 2015 y 2016 el PIT-CNT logró que el Poder Ejecutivo cambiara en tres oportunidades los criterios con los que se plantó en los Consejos de Salarios. “Se decía que las pautas no se podían tocar porque iban a desatar la inflación. Obviamente, hubo un presidente sensible al pedido de los trabajadores, pero la lucha se dio”.

Abdala destacó la importancia del 6% del Producto Interno Bruto para la educación pública. “El apellido no es menor. ¿Hasta cuándo vamos a seguir subsidiando empresas que eligen la rama de la actividad de la educación pero que podrían ser de cualquier otra, porque están por la rentabilidad? ¿Hasta cuándo vamos a permitir que no hagan aportes patronales? Todos los subsidios para la educación privada podrían ayudar a ser un componente para la financiación de la educación pública”.