Lejos estuvo el Comité Ejecutivo del Partido Socialista (PS) de resolver el tema por consenso. La votación de la declaración fue de 12 a 10 y reavivó las divisiones que se dieron en la campaña electoral interna de marzo del año pasado, cuando este sector decidió en elecciones sus autoridades, en un escenario que confrontó a la actual secretaria general, la senadora Mónica Xavier, con el asesor del Instituto Cuesta Duarte del PIT-CNT Daniel Olesker.

La declaración que aprobó el PS es un fuerte espaldarazo a la cancillería de uno de los sectores más grandes del Frente Amplio, en momentos en que el canciller, Rodolfo Nin Novoa, no goza de buena aprobación en algunos sectores de la fuerza política oficialista. La expresión minoritaria, en cambio, bregaba por transmitir su preocupación ante el “viraje” que significa la posición del gobierno. “Nuestro compromiso con las instituciones democráticas es de principios”, dice el texto aprobado en el Ejecutivo socialista, que señala que “no puede construirse una sociedad justa tolerando formas abiertas o veladas de corrupción, de abuso, de nepotismo, de autoritarismo o de elitismo”.

Respecto de Venezuela, se observa con “preocupación” que los “avances” en ese país “en materia de inclusión social, soberanía y libertades conquistados bajo el gobierno del ex Presidente Chávez son afectadas por las acciones antidemocráticas del gobierno de Nicolás Maduro, y por la desestabilización generada por una derecha violenta que no apuesta a la negociación sino al derrocamiento del gobierno”.

“La única forma de enfrentar el intervencionismo imperialista es con más democracia”, subraya la declaración, que sin embargo entiende que “la convocatoria a elección de una Asamblea Constituyente fuertemente cuestionada por amplios sectores de la sociedad venezolana en un marco de dudosa legitimidad, el permanente asedio a líderes de la oposición, junto con la reciente destitución de la Fiscal General constituyen hechos de alta sensibilidad que atentan contra la búsqueda de una salida negociada a la grave situación política que atraviesa el país”. Tras afirmar que la “única salida superadora” es “por la vía del diálogo y la expresión de la soberanía popular”, el PS “respalda al gobierno uruguayo en todas las acciones que ha realizado”, así como “las difíciles decisiones tomadas en las últimas horas ante el permanente deterioro del orden democrático que se sigue sucediendo en el hermano país”.

También ayer, la senadora de Asamblea Uruguay Daniela Payssé defendió la decisión del gobierno. Según dijo a El Espectador, el alineamiento de Uruguay con el resto de los países del Mercosur responde a la defensa de los derechos humanos en ese país. Si bien se negó a calificar al gobierno venezolano de dictadura, dijo que “se ha desviado de lo que es la institucionalidad democrática”. “El imperio no es causante de todo lo que sucede en Venezuela”, sostuvo.

Exposición de motivos

El canciller Rodolfo Nin Novoa dijo ayer que el apoyo de Uruguay a la aplicación del Protocolo de Ushuaia del Mercosur a Venezuela no dejaba “otra alternativa”, dada la “imposibilidad y negativa cerrada” de Venezuela de abrir un canal de diálogo con la oposición. En diálogo con el programa En perspectiva, de Radio Oriental, explicó que si bien Uruguay pudo haberse abstenido en la votación, no lo hizo. “Hicimos 22 convocatorias para fomentar el diálogo y olvidamos muchos agravios que el gobierno venezolano ha hecho en este último año y medio”, dijo el jerarca, que negó que la suspensión vaya tener un efecto concreto en el pueblo venezolano. “Es una señal política. Desde el punto de vista comercial, de las relaciones diplomáticas y de lo que va a suceder al pueblo venezolano, creo que cambia poco en la medida de que no haya voluntad de dialogar”.

Incluso Nin cuestionó el accionar de la Asamblea Nacional Constituyente, cuya integración se votó el domingo 30 de julio: “Cuando se pasa por arriba a la Asamblea Nacional y se nombra una Asamblea Nacional Constituyente que es para reformar la Constitución, y el primer acto que hace es echar a la fiscal general de la Nación, con el repudio de todas las fiscalías del Mercosur exhortando a rever esa situación, cada vez más se muestra la intencionalidad de esta asamblea”.