En un acto de enorme contenido político, la presidenta argentina, Cristina Fernández, firmó ayer el acuerdo al que llegaron el gobierno y la Asociación del Fútbol Argentino (AFA), por el cual el Estado será el propietario de los derechos de transmisión y comercialización de los partidos de los torneos de fútbol de Primera División. Secundada a un lado por el presidente de la AFA, Julio Humberto Grondona, y al otro por el técnico de la selección argentina, Diego Armando Maradona, la mandataria encabezó el acto realizado en el predio de la AFA, ubicado en la localidad bonaerense de Ezeiza, que se abrió con la ejecución del himno argentino, cantado a viva voz por los cientos de asistentes, entre los que se encontraban las principales figuras del gobierno, además de sindicalistas y algunos militantes de corte netamente tribunero.

Luego de la emoción despertada por el himno, la excitación en el auditorio bajó cuando habló brevemente Grondona, dirigente que no se destaca por sus dotes de orador, pero que gracias a su enorme habilidad se ha mantenido firme en su cargo desde que lo asumió, en 1979, trascendiendo gobiernos militares, radicales y peronistas. Posteriormente le tocó el turno de su discurso a Cristina Fernández, la gran estrella del evento, que llegó a los hogares argentinos por cadena nacional de radio y televisión.

Además de recalcar reiteradamente que este acuerdo les permitirá ver los partidos a todos y no solamente a aquellos que pueden pagar (“hemos dado un paso grande en la democratización de la sociedad”, señaló), la presidenta anunció que el producto de la comercialización de los partidos se repartirá en partes iguales entre la AFA y el Comité Olímpico Argentino y aclaró que “el gobierno no quiere hacer negocios con el fútbol”, sino que busca “promover el deporte”. Desde hace meses en Colombia está dando vueltas una reforma constitucional, en la que está en juego que el actual presidente, Álvaro Uribe, pueda pugnar por acceder a un tercer mandato. Si bien él no ha hecho público tal deseo, lo cierto es que la reunión de la semana pasada en la casa de gobierno (donde convocó a los congresistas del oficialismo para instarlos a que votaran positivo al proyecto de ley) fue una clara señal, de la que obtuvo sus resultados. Al menos ésa es la lectura que se hace, tras la sesión de la Cámara de Senadores que se realizó el miércoles, y en la que el proyecto que preguntó a los colombianos si aprueban modificar la Constitución para una segunda reelección

El corto pero contundente discurso de Fernández tuvo un fuerte contenido emotivo, y en esa línea la presidenta hizo varias veces referencia a la pasión que despierta el fútbol en los habitantes de su tierra -recordó su partidarismo por Gimnasia y Esgrima de La Plata- y se confesó, además, “hija, hermana, madre y esposa” de fanáticos del más popular de los deportes. “Hoy es un día histórico para el fútbol, la AFA y para la posibilidad de vivir en una sociedad más justa y democrática”, concluyó la presidenta, provocando el último de los numerosos aplausos generados por sus palabras.

El convenio -firmado un día antes de que comience el Torneo Apertura argentino, cuya primera fecha será emitida íntegramente por el estatal Canal 7- posibilitará que todos los partidos se vean a través de la televisión abierta y próximamente se prevé que se les dé participación a las restantes señales que se emiten por aire.

Desde hacía 18 años, los derechos de televisación los tenía la empresa Televisión Satelital Codificada, perteneciente al Grupo Clarín -enemigo declarado del kirchnerismo-, pero en las últimas semanas una astuta jugada del gobierno llevó a que la AFA rompiera el contrato que tenía con esta empresa privada, lo que dio paso al acuerdo firmado ayer.