Un documento que el Secretariado Ejecutivo del PIT-CNT le presentará a la Mesa Representativa, convocada para el 20 de diciembre, señala que el país se encuentra en una etapa “de claro cambio progresista” y recuerda que “independencia de clase no significa indiferencia sobre la actualidad política”. El gremio de los municipales de Montevideo (ADEOM), en tanto, buscará el respaldo del resto de la central para aprobar un nuevo paro general de 24 horas, y reclama un pronunciamiento contra el decreto de esencialidad.

El documento del secretariado fue redactado por los coordinadores del PIT-CNT, Fernando Pereira y Juan Castillo, y el dirigente de la salud Jorge Bermúdez. Hablan de mantener “la unidad de acción” y los equilibrios en la representación y conformación de los organismos de la central.

Clases particulares

El viernes, en su audición radial, el presidente José Mujica habló de la importancia de la formación sindical. Joselo López le responde: “No conozco una escuela para ser presidente, pero capaz que Mujica tendría que consultar con Tabaré Vázquez  de qué manera  tiene que manejarse un primer mandatario”.

“Nuestra independencia de clase, nuestra caracterización del actual gobierno y nuestro relacionamiento con el mismo debe tomar en cuenta los avances conquistados a partir de 2005”, señalan, antes de asumir su compromiso con “la continuidad y la profundización” del “proceso de cambios” impulsado por el Frente Amplio (FA). Piden que el “conjunto de los trabajadores” cierre filas “en torno a la defensa de la unidad, sin ceder ante ninguna clase de oportunismo”.

Tanto Joselo López (Confederación de Organizaciones de Funcionarios del Estado, COFE) como Álvaro Soto (ADEOM) cuestionaron las “características progresistas” del FA. “Sin duda es diferente a los partidos tradicionales”, dijo López, quien destacó que el gobierno “avanza en algunos postulados” históricos de la izquierda, “pero en otros es absolutamente retardatario”. Además, destacó el gran “control social” que tiene el gobierno sobre la población. “Si esta conflictividad se daba con los partidos tradicionales, ahora estaban incendiadas las praderas, no tengo dudas”, afirmó.

Soto descartó que el actual gobierno fuera “progresista”. Puso como ejemplo los decretos de esencialidad de la Intendencia de Montevideo y de desalojo de las ocupaciones de los edificios públicos, y el no cumplimiento del programa de gobierno del FA.

Respecto a la interna sindical, ambos dirigentes resaltaron que la central “no debe mediar” en los conflictos sino “ponerse del lado de los trabajadores”. Para López, tras el paro general del 7 de octubre se debió elaborar un plan de movilizaciones. “Estábamos en medio de la discusión del presupuesto en la que en la mayoría de los sectores no había habido acuerdo, y en la ronda de Consejos de Salarios había habido diferencias fundamentales. Si hubiera habido estrategia de la dirección del movimiento sindical, quizás hubiera sido mejor para los sectores más debilitados”, expresó.

Por su parte, Soto expresó que “cualquier declaración de apoyo” a las medidas “antisindicales” que toma el gobierno termina siendo un factor de “infracción a la unidad de acción”. Además, sostuvo que el secretariado debería “sacar un pronunciamiento repudiando el decreto de esencialidad” y anunció que llamará a una mesa representativa urgente para discutir un paro de 24 horas. “Esto trasciende el problema de lucha reivindicativa, de la plataforma y sus métodos. No hay mucho para discutir, o se está de un lado o de otro. Lo demás son adornos”, afirmó.