Todo esto fue tras el lanzamiento en la Torre Ejecutiva de un libro de la Secretaría de Comunicación Institucional de la Presidencia de la República (SCI), titulado “Uruguay. Ser en el mundo”, que recopila los discursos dados por el mandatario en 31 de los viajes que realizó durante su gestión. El ministro de Defensa, Gonzalo Fernández, fue el encargado de brindar los detalles de la bitácora, y lo que comenzó como la presentación de la publicación terminó en una suerte de despedida de Vázquez de la prensa. Antes del intercambio, el director de SCI, José Luis Veiga, destacó que “el gobierno jamás presionó a ningún medio de comunicación ni a ningún periodista”.

Sin embargo, el propio Vázquez asumió: “Si bien el relacionamiento con los medios de comunicación fue respetuoso, serio y adecuado, hay que reconocer que hubo algunas circunstancias poco felices, que las tomo a mi cargo como presidente de la República”, y luego aludió a un caso en el que “un trabajador fue maltratado por un funcionario de este gobierno”. “Ésta es la oportunidad para pedirle públicamente a este trabajador las disculpas en nombre del gobierno nacional”, refiriéndose al desencuentro que habían tenido el subdirector de SCI, Gustavo Antúnez -presente ayer en la conferencia-, con Martín Pintos, de El Espectador, insultado por el jerarca vía mensaje de texto, tras el acto de rendición de cuentas realizado en la avenida 18 de Julio a principios de 2009.

“No es con grandes discursos que se puede engalanar esta situación, sino con una palabra que tiene siete letras y dice muchísimas más cosas, y ésta es ‘gracias’, porque siempre hemos encontrado eco en el pueblo uruguayo y nunca nos dejaron solos”. Tras este mensaje a la ciudadanía, el presidente volvió a parafrasear a François Mitterrand para explicar por qué no siempre el contacto con los periodistas fue tan fluido: “Cuando habla un presidente, habla un país, y cuando habla el país hay que hacerlo con seriedad y responsabilidad, no se puede salir a opinar de todos los temas en cualquier momento y circunstancia”, justificó.

Luego sí abrió el micrófono para las preguntas. Consultado por la diaria sobre la iniciativa del presidente electo, José Mujica, para que la oposición integre los entes autónomos y servicios descentralizados, Vázquez contestó que le parece “excelente” y admitió que él no había tenido éxito cinco años atrás cuando emprendió la misma empresa. Le deseó “el mayor de los éxitos” a Mujica y afirmó que, a su juicio, es posible “avanzar un paso en esto”, que “es trascendente, importante y necesario”. Divino

Al referirse a las características que deberían tener los gobiernos futuros, Vázquez recordó un encuentro que tuvo con el papa Juan Pablo II mientras era intendente, en el que éste le había comentado que “un gobierno, antes de ser de derecha o de izquierda, tiene que ser humano”. Al respecto dijo estar “absolutamente seguro de que el próximo gobierno va a ser humano”.

Para disminuir más la pobreza, recomendó aplicar “el programa de gobierno que tiene la fuerza política”, a la cual se siente “muy honrado de pertenecer”. Además, negó que vaya a crear una futura agrupación política en el Frente Amplio: “Yo soy frenteamplista y voy a seguir siéndolo. Sería muy ingrato de mi parte generar un grupo político dentro del FA. Fui elegido con el respaldo de todos los grupos y comités de base, mi pertenencia es al FA”, sentenció.

También ratificó el apoyo del gobierno a la reelección del chileno José Miguel Insulza a la secretaría de la Organización de Estados Américanos (OEA), y negó haber tenido discrepancias con Mujica por la financiación del acto de traspaso de mandato, que informó que “está pago por el gobierno uruguayo”. Luego bromeó sobre el espectáculo público financiado por privados aludiendo a que “pondría algunos pesitos para que canten los Diablos Verdes”. Respecto del Mercosur, Vázquez interpretó que en el quinquenio “se avanzó”, pero “no todo lo que hubiéramos querido”. “Es muy difícil progresar en un proceso de integración con tantas desigualdades y diferencias de dimensiones entre los socios. Éste es uno de los principales temas que hay que solucionar”, resumió, y puso un ejemplo: “En las instrucciones del año 13 de Artigas, se establecía que no se cobraría impuesto alguno entre el comercio de las provincias de aquel entonces, ni se pagarían derechos de puertos. Sin embargo hoy, 200 años después, tenemos algunas dificultades de ese tipo que no hemos podido superar”.

Calificó las relaciones con Argentina de “excelentes”, y se refirió al conflicto de Botnia como “uno de los tantos desencuentros particulares que ha habido a lo largo de la historia”. También opinó que el diferendo se “va a solucionar” y recordó que “hay una instancia jurídica internacional en este tema”. El presidente tampoco descartó su posible candidatura en 2014 y lo hizo de la misma manera que en las últimas diez veces que se refirió al tema: “Las circunstancias políticas y la biología dirán cuál será mi actividad en cinco años”. Así, Vázquez terminará su mandato “sin nostalgia, sin fervor y sin euforia”, “pero con una gran serenidad espiritual, con la conciencia tranquila, la frente en alto y las manos limpias”.