Las donaciones al Movimiento de Participación Popular por parte de sus parlamentarios, que se venían efectuando por un acuerdo “de palabra”, ahora tendrán un sustento escrito que no establecerá la obligación legal de realizar esos desembolsos pero hará explícito un “compromiso político y ético” en tal sentido, así como el de renunciar al Parlamento si se abandona el sector.

A juicio del diputado (por Canelones) Esteban Pérez, “ahora si alguien se va con la banca, quedará demostrado que no cumplió lo que firmó”. Ese compromiso escrito con “directivas para el funcionamiento político”, cuya obligatoriedad estableció ayer la Dirección Nacional del MPP, será redactado por el Ejecutivo Nacional del sector, que tendrá a su cargo decidir cómo se implementará.

En ese documento se declarará que las bancas pertenecen a la agrupación y no a los legisladores. Según Pérez, “de esta manera se asumirá el compromiso de representar al MPP” y “a la austeridad que estamos pregonando”, incluyendo el compromiso de “donar parte de nuestro sueldo al MPP y al fondo Raúl Sendic”. De todos modos, el diputado apuntó que en una eventual reforma constitucional habría que reglamentar que “las bancas sean de los partidos y no de los legisladores, de forma que si uno se cambia tenga que entregarlas a su sector”. Esto no puede exigirse legalmente en la actualidad, y Saravia había sostenido que de acuerdo con la Constitución la banca “es del legislador”, de modo que la firma de conformes era “inconstitucional”.

Otro de los más firmes opositores a la firma de conformes fue el diputado (por Florida) Álvaro Vega, quien propuso -en cambio- suscribir contratos. Vega aceptó de buen grado la resolución de ayer y opinó que se trata de una “decisión políticamente correcta, y desde el punto de vista filosófico, muy sabia”.

El diputado dijo que “no va a haber contrato ni conforme”, y otras figuras del MPP coincidieron en que el “compromiso ético y político” sustituye a las propuestas de documentos creadores de obligación legal. Sin embargo, Pérez afirmó que el tema del mecanismo jurídico “no está descartado”. “No es que se dejó de lado, sino que los asesores que tenemos aún no se han puesto de acuerdo, por lo que no se sabe si lo mejor podrían ser conformes, vales u otras posibilidades”, señaló.

Según el diputado por Canelones, el Ejecutivo Nacional del MPP podría definir que el documento jurídico sea necesario para complementar la implementación del compromiso político y ético, aunque “quizás esto no sea necesario”.

La renuncia de Saravia al MPP fue aceptada por la Dirección Nacional, pero esto no activa ninguna discusión acerca de su banca en el Senado, ya que el legislador integra también la Agrupación Masoller, que forma parte del Espacio 609 y fue electo como representante de aquélla.

Las fuentes consultadas coincidieron en que si Saravia, dada la resolución de ayer, quisiera volver al MPP, la dirección tendría que “considerarlo”. El senador había expresado su radical desacuerdo con la idea de firmar conformes, señalando que éstos podrían obligar incluso a sus familiares si él falleciera, considerándose “ofendido” por la nueva exigencia planteada, ya que según dijo siempre ha cumplido con el aporte comprometido “de palabra”. Luego (ver la diaria del 12-3-10) afirmó que también estaba molesto por la forma en que el MPP se relacionaba con los otros sectores del Espacio 609.

Consultado acerca de la renuncia de Saravia, Vega opinó que “si uno hizo los planteos y éstos fueron escuchados, se podría cambiar”, pero añadió: “Cada cuál sabe lo que buscaba”.