El procurador general de Colombia, Alejandro Ordóñez, dijo en un comunicado que “sancionó disciplinariamente a la actual senadora Piedad Córdoba Ruiz con destitución e inhabilidad por el término de 18 años” por haber “promocionado y colaborado” con la guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), informó la revista colombiana Semana. La acusación se basa en el análisis de los correos electrónicos encontrados en las computadoras de Raúl Reyes, un líder las FARC muerto en 2008.

La Procuraduría consultó organismos como la Corte Suprema, la Fiscalía, Interpol y la Policía Judicial para establecer, “con certeza”, que Córdoba, por ejemplo, aconsejó a las FARC no enviar videos de los secuestrados, sino grabaciones de voz para mejorar “la estrategia en la búsqueda de sus objetivos”.

En los últimos años, Córdoba medió ante las FARC, junto con el presidente de Venezuela, Hugo Chávez, y logró la liberación unilateral de doce rehenes de la guerrilla.

“Es una sanción sin precedentes en la historia de Colombia y se nota cierta sevicia [crueldad] del operador judicial [Ordóñez]”, dijo el abogado de Córdoba, Ciro Quiroz, y anunció que impugnará la decisión. Al conocer la decisión, Córdoba, que regresó ayer de Venezuela, publicó en su Twitter: “En este momento estoy reunida con mis abogados sobre decisión del #Procurador, Tranquil@s q #PiedadInocente”.

El senador y vocero del gobernante Partido de la U, Roy Barreras, apoyó la decisión de la Procuraduría, que coincide con la solicitud que hizo la semana pasada al presidente del Congreso, Armando Benedetti, “para que releve a la senadora Córdoba de la Comisión de Paz, porque no puede usar esa investidura para despotricar de Colombia como lo hizo en el Parlamento Europeo semanas atrás”, informó la radio colombiana RCN. Ante el Parlamento Europeo, Córdoba habló a favor de una solución negociada al conflicto con las FARC, algo a lo que se opone el gobierno. Por otra parte, las FARC anunciaron que Félix Antonio Muñoz Lascarro, alias Pastor Alape, integrará su cúpula como reemplazante del jefe militar, Mono Jojoy, muerto el jueves en un bombardeo en el que también fallecieron otros nueve guerrilleros.