En el marco del debate sobre la educación, y en particular sobre la aprobación del polémico Promejora, mucho opinaron los actores políticos sobre el rol de los integrantes del Codicen y los consejos desconcentrados electos por los docentes. Para la consejera del Codicen, Teresita Capurro, electa por los docentes, los sindicatos no pueden "decirme lo que tengo que hacer", porque de lo contrario "la autonomía del ente puede estar lesionada". Quienes entienden que los consejeros electos por los docentes responden al sindicato hacen "una lectura muy liviana", afirmó, y dijo que una de sus principales preocupaciones es que no se debilite la representación docente.

Cuando la Federación Uruguaya de Magisterio (FUM) resolvió que Capurro encabezara la lista para las elecciones de las autoridades de la enseñanza también se resolvió, entre dos mociones, que no estaría mandatada por la FUM en su cargo. "Además yo había puesto como condición a quienes promocionaron mi nombre de que si iba mandatada no aceptaba encabezar la lista, porque ahí entonces la autonomía del ente puede estar lesionada. Yo soy consejera y me caben todas las de la ley. No puede un sindicato, en este caso el mío, decirme lo que tengo que hacer, porque si no, en el ente autónomo ¿quién manda? Yo asumí con esa claridad", aseguró Capurro a la diaria.

La situación es distinta a la de la Federación Nacional de Profesores de Secundaria (Fenapes), que considera que los representantes de los docentes responden a las agrupaciones de los trabajadores. Capurro no quiso referirse a la situación de Fenapes "porque cada sindicato tiene su autonomía y su forma estatutaria de resolver".

En el caso de la FUM, sus autoridades han reiterado que Capurro está desvinculada del sindicato y la propia consejera aseguró que no tienen comunicación. "Otra cosa distinta es el mandato ético que yo me autoimpongo: lo que defendí en la federación lo sigo defendiendo ahora, porque para mí es un tema de principios. Esto no quiere decir que coincida siempre con las decisiones de los trabajadores, porque también en las organizaciones sindicales hay elecciones, y un día gana uno y otro día el otro", agregó.

A no desaprovechar

Pese a lo que indica Capurro, desde que asumieron los consejeros electos por los docentes, la oposición ha afirmado que el gobierno de la educación está dominado por “corporaciones sindicales”, e incluso han surgido propuestas para disminuir el peso de los docentes en los consejos. El presidente José Mujica propuso a los representantes de los partidos políticos, en el marco del acuerdo educativo, que el presidente del Codicen tenga voto doble y que se agregue un consejero más al organismo de conducción, y desde la oposición, el senador Pedro Bordaberry presentó un proyecto de ley para eliminar la facultad de voto de los consejeros docentes.

Una experiencia

Teresita Capurro votó afirmativamente el Promejora, uno de los proyectos innovadores que aprobó el Codicen en el presupuesto nacional. "Si mañana aparece lo vuelvo a aprobar. Creo que es una experiencia piloto, y vale la pena recorrer el camino", opinó la consejera, y recordó que la experiencia se aplicará solamente en 20 centros. Destacó que hay elementos como el fortalecimiento de los centros educativos, la autoevaluación y el diagnóstico que forman parte de las tradiciones de la escuela uruguaya, y que parte del trabajo de este proyecto tiene que ver con el Programa Aprender de Primaria. "De repente por eso a los maestros no nos hace tiritar el Promejora, porque está dentro de la línea de trabajo que tenemos. Creo que no se entendió y se cruzaron otras cosas", opinó.

Capurro dijo que ha sido una de las “principales preocupaciones” que no se debilite la presencia de los representantes docentes: “De ahí que he sido muy ecuánime y muy cuidadosa, no pensando en mí, sino en los que vendrán”. “Se ha luchado mucho para lograr la presencia de los trabajadores en el gobierno de la enseñanza”, aseguró, “y me daría mucho dolor hacer lecturas muy simples y superficiales”. Reivindicó que las elecciones fueron por voto secreto y que es imposible saber si, por ejemplo, a ella la votaron todos los afiliados a la FUM. “Cuando se nos identifica, por haber sido promocionada por una lista sindical, como que respondo al sindicato o que el sindicato me manda están cometiendo un error y haciendo una lectura muy liviana”, aseguró.

Sobre la propuesta de Mujica de otorgar doble voto el presidente del Codicen, Capurro dijo que cuando hay empate en el órgano (integrado por tres miembros designados por el Poder Ejecutivo y dos electos por los docentes) actualmente ya desempata el voto del presidente, y agregó que hasta el momento eso no ha ocurrido porque se ha apostado al consenso.

Consideró que, tal como está integrado el Codicen o los consejos desconcentrados de Educación Inicial y Primaria, Educación Secundaria, Educación Técnico-Profesional y Formación en Educación -en los que dos integrantes son designados por el Codicen y uno electo por los docentes-, el voto de los trabajadores “no puede obstaculizar nada”.

Sobre la otra propuesta del presidente, que apunta a transformar la UTU en un ente autónomo, dijo que no se ha conversado en el Codicen y que tampoco estuvo presente en la reunión que mantuvieron con Mujica. “Según la Ley de Educación se está trabajando por el Instituto Tecnológico Superior que es un mandato de la ley y una muy buena propuesta”, agregó.

Capurro deseó que el acuerdo educativo convocado se haga “pensando en algo mucho más trascendente”, ya que de lo contrario “estamos poniendo parches a situaciones que arrastramos hace décadas y nunca terminamos de ponernos de acuerdo”. Consideró que el debate deberá terminar en el segundo congreso de la educación a convocarse este año y opinó que los partidos políticos “tienen una gran responsabilidad” en la discusión. “Decirle a los partidos que no opinen no me parece bien, tienen que opinar, porque representan al pueblo que los votó”, manifestó.