Las elecciones Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO), en las que se van a definir, entre otros cargos, los candidatos a la presidencia argentina para las elecciones del 25 de octubre y los candidatos a gobernador de varias provincias, llegan con la atención colocada en Buenos Aires. En este distrito electoral, el mayor del país, la interna kirchnerista dio un giro inesperado.

Ante los recientes fallos de las empresas encuestadoras -en particular en la elección porteña, donde la ventaja con la que fue electo el macrista Horacio Rodríguez Larreta fue mucho menor que la anunciada-, las PASO servirán el domingo para conocer el mapa electoral de Argentina para el 25 de octubre. En esa fecha se elegirá al presidente y los gobernadores de las provincias que tienen primarias el domingo: Chubut, San Juan, Misiones, Entre Ríos, San Luis y Buenos Aires.

El gobernante Frente para la Victoria (FpV) es favorito en las dos instancias principales de las PASO del domingo: las nacionales y las de Buenos Aires. El jefe de Gabinete argentino, Aníbal Fernández, precandidato a gobernador bonaerense y favorito para ganar esa elección, fue objeto de una denuncia periodística, presentada por el periodista Jorge Lanata, que lo vincula con el narcotráfico. Esto hizo que se animara la interna kirchnerista, ya que Fernández acusa a su rival del FpV por la candidatura a gobernador, Julián Domínguez, presidente de la Cámara de Diputados, de ser cómplice de una campaña mediática en su contra.

La presidenta argentina, Cristina Fernández, le dio su respaldo al jefe de Gabinete durante un acto transmitido por cadena nacional y señalado por la oposición como ilegal en tiempos de campaña. Además de anunciar un aumento bianual de jubilaciones, la presidenta consideró que las denuncias contra el funcionario son “dispositivos antidemocráticos” realizados por “los grupos de tareas”, en referencia a los de la dictadura.

Ayer, a horas de la veda electoral que comienza esta mañana, el jefe de Gabinete dijo que junto con su compañero de fórmula, Martín Sabbatella, el presidente de la Autoridad Federal de Servicios de Comunicación Audiovisual (AFSCA), llevó adelante su campaña “sin ensuciar a nadie”. Pero su adversario en la interna, Domínguez, contraatacó y dijo que desde la AFSCA hubo una “campaña de descalificación personal” para vincularlo al Grupo Clarín.

Nación y provincia

El actual gobernador bonaerense y candidato kirchnerista a la presidencia, Daniel Scioli, que no tiene rival en las PASO del FpV, dijo ayer, antes de su acto de cierre de campaña, que hay sectores que quieren “cambiar la agenda”, con las denuncias en contra de Aníbal Fernández.

Otro precandidato presidencial, Mauricio Macri, dijo a la radio Mitre que él está “tranquilo” porque está “convencido” de lo que está haciendo y de que “cada vez” son más quienes creen “en la necesidad de cambio”. El derechista Macri es el favorito en la interna de la coalición Cambiemos, en la que compite con la diputada de la Coalición Cívica Elisa Carrió (que participó en las denuncias contra Aníbal Fernández) y el líder de la Unión Cívica Radical, Ernesto Sanz. Las encuestas concluyen que Macri es el candidato mejor posicionado frente a Scioli, y aunque no ganaría en octubre podría pasar a una segunda vuelta.

Sergio Massa, tercero en las encuestas para octubre y probable ganador en las PASO de la alianza Una Nueva Argentina, en la que compite con el gobernador de Córdoba, Miguel de la Sota, tiene como principal feudo electoral la provincia de Buenos Aires, aunque su apoyo está muy debilitado incluso allí. Cerró su campaña junto a su candidato a gobernar esa provincia, Felipe Solá, confiado en dar una “sorpresa” el domingo.