Miles de personas se movilizaron ayer en Islandia para reclamar la renuncia del primer ministro, Sigmundur David Gunnlaugsson, que según las revelaciones de los Panama Papers mantuvo oculta una empresa offshore. La oposición de ese país ya anunció que presentará una moción de censura para el primer ministro, aunque él dijo que no renunciará y que confía en contar con el respaldo suficiente en el Parlamento. Tanto Gunnlaugsson como los políticos de otros países que, según las revelaciones, cuentan con empresas offshore, negaron haber cometido ilícitos. Entre ellos se cuentan “varios” políticos brasileños de siete partidos (entre los cuales no figura el Partido de los Trabajadores), informó el diario de O Estado de São Paulo.

Por su parte, Francia y Alemania anunciaron que iniciarán investigaciones de oficio sobre este tema. También lo hizo Reino Unido, donde creció la presión contra el gobierno por la presencia en la lista de varios políticos del Partido Conservador y del padre del primer ministro David Cameron, Ian.

En Argentina la revelación de que el presidente Mauricio Macri fue director y vicepresidente de una empresa offshore sigue generando críticas, incluso entre sus aliados. El opositor Frente Renovador de Sergio Massa y la Coalición Cívica de Elisa Carrió, que integra la alianza de gobierno, exigieron al gobernante más explicaciones que las que dio el comunicado publicado el domingo. El texto explicaba que Macri no incluyó esta empresa en sus declaraciones juradas porque no era accionista y sólo la integró de forma nominal. Carrió dijo en un comunicado que Macri “debe probar sus dichos” y Massa pidió que el presidente brinde “las explicaciones correspondientes” mediante una “cadena nacional”.

También se refirió a este tema el ex jefe de gabinete kirchnerista Aníbal Fernández, y dijo en Twitter que Macri sí tendría que haber incluido la información sobre Fleg Trading SA en sus declaraciones juradas. Argumentó que la resolución 3.293 de 2012 de la Administración Federal de Ingresos Públicos establece que los directores de las “entidades constituidas, domiciliadas, radicadas o ubicadas en el exterior” deberán incluir la información sobre estas en sus declaraciones juradas.

A raíz de estas revelaciones, la bancada de diputados del Frente para la Victoria pedirá a Macri que brinde explicaciones ante el Congreso y además exigirá la salida del gobierno de Laura Alonso, encargada de la Oficina Anticorrupción, quien en su cuenta de Twitter defendió a Macri y dijo: “Constituir sociedad en paraíso fiscal no es delito en sí mismo, señores”.

El padre del presidente, Franco Macri, aclaró en un comunicado que su hijo “no tuvo participación en el capital” de Fleg Trading SA, y que sólo fue un “director circunstancial, designado en el marco de confianza que exigía la dinámica de los negocios del grupo familiar en aquella época”. Agregó que creó la firma “como holding para participar en otras entidades no financieras para el desarrollo de diversos emprendimientos privados, particularmente en Brasil”.

Ayer el diario Perfil publicó que Macri aparece como director en una segunda empresa offshore, Kagemusha SA, que aparece activa en el Registro Público de Panamá y que no figura en la última declaración jurada del presidente, la de 2015.