En el referéndum que se realizó durante la jornada de ayer, los británicos decidieron dejar la Unión Europea (UE), con 51,9% de los votos a favor del brexit y 48,1% en contra.

El primer ministro, David Cameron, que lideró la campaña por la permanencia, anunció que renunciará a su cargo antes de octubre. “No creo que sea adecuado que yo sea el capitán que dirija nuestro país hacia su siguiente destino”, dijo. Cameron también anunció que el Partido Conservador, que él lidera, elegirá un nuevo liderazgo en octubre. Los medios británicos indican que lo más probable es que los tories elijan a un líder favorable al brexit y que éste sea quien reemplace a Cameron.

Además, después de que se conocieran los resultados la primera ministra escocesa y líder del Partido Nacional Escocés, Nicola Sturgeon, dijo que es “altamente probable” que esta región realice un nuevo referéndum para independizarse de Reino Unido. En 2014 los escoceses decidieron en un referéndum permanecer en Reino Unido por 62% de los votos. Ayer, en Escocia el resultado fue favorable a la permanencia en la UE y Sturgeon ya había advertido que podría repetirse el referéndum si la decisión de todos los británicos era distinta a la de los escoceses.

Otra de las consecuencias que se produjo horas después de que se conociera el resultado del referéndum fue la caída de la libra esterlina en los mercados internacionales. La moneda británica llegó a sus niveles más bajos desde 1985.

El resultado del referéndum también puso en peligro la permanencia como líder del Partido Laborista de Jeremy Corbyn, quien también participó en la campaña por la permanencia en la UE. Corbyn ya enfrentaba resistencias entre los laboristas más centristas, que ayer comenzaron a reunir apoyos para pedir su dimisión.

Esta es la primera vez que un país decide abandonar la UE, creada en 1992, aunque esta posibilidad está contemplada en los estatutos fundadores del bloque. Estos establecen un período de dos años de negociaciones antes de que se concrete la salida, que debe ser aprobada en votación por los demás países miembros. En un comunicado emitido hoy, las instituciones del bloque indican que se respetará la decisión de los británicos y piden que esta se implemente “lo más pronto posible” porque “un retraso prolongaría la incertidumbre innecesariamente”.

En conferencia de prensa, la canciller alemana Angela Merkel lamentó el resultado del referéndum. “No hay nada de que hablar. El día de hoy supone un punto de inflexión para Europa y para el proyecto europeo”, dijo antes de llamar a la unidad a los restantes 27 integrantes de la UE.

Merkel también dijo que convocó para el lunes un encuentro con el presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, el presidente francés, François Hollande y el primer ministro italiano, Matteo Renzi.