En las PASO se elegirá entre los distintos precandidatos a participar en las elecciones legislativas del 22 de octubre, con todas las miradas puestas en la provincia de Buenos Aires, la más importante por sus dimensiones y su valor electoral. Sólo el Partido Justicialista (PJ) llega a estas primarias con competencia interna, en la que el favorito es el ex ministro del Interior de Fernández, Florencio Randazzo. En las demás organizaciones políticas, aunque no haya candidatos enfrentados, sí hay una disputa por ser el partido o coalición que lleve a más simpatizantes a votar el 13 de agosto. En este marco es que tanto el oficialismo, que se presenta nuevamente con la coalición Cambiemos, como Unidad Ciudadana (UC), la nueva formación de Fernández, se volcaron a las calles este fin de semana para hacer campaña.

Macri se involucró en la campaña junto a la gobernadora de Buenos Aires, María Eugenia Vidal. Los dos dirigentes más populares del oficialismo usaron una de las modalidades más conocidas de campaña cara a cara, que Cambiemos denomina “timbreada”: una recorrida por los barrios en la que los dirigentes, vestidos con ropa informal, tocan timbre en las casas para hablar con la gente. Macri y Vidal estuvieron juntos en Haedo, distrito en el que creció la gobernadora, mientras candidatos y ministros recorrían otras zonas.

Además de la timbreada, el fin de semana estuvo repleto de actividad y anuncios con tintes electorales. Por ejemplo, ayer el diario Clarín informó que Macri se dispone a firmar esta semana un decreto para entregar créditos a los beneficiarios de las asignaciones familiares, personas de pocos recursos, un sector de la población en el que Cambiemos cuenta con poco respaldo. Por su parte, el jefe de gabinete, Marcos Peña, participó en el programa de Mirtha Legrand acompañado por su esposa. “El principal rival que tenemos no es Cristina, sino el pesimismo y el escepticismo”, dijo allí Peña. Pareció contradecirlo Vidal al publicar el primer spot oficialista mientras Fernández encabezaba un acto en el que lanzó oficialmente su campaña, el viernes.

La campaña no se inició al comenzar el plazo oficial, ya que tanto unos como otros empezaron antes. La ex presidenta lo hizo con el acto en el estadio de Arsenal, en el que lanzó su nueva formación, UC, mientras que el oficialismo aumentó el número de spots oficiales que utiliza el gobierno para dar a conocer los cambios que impulsa en Argentina, informó el diario La Nación.

Pero, formalmente, Fernández lanzó su campaña el viernes, en Mar del Plata. A diferencia del acto en Arsenal, este se desarrolló en un lugar cerrado con capacidad para 1.500 personas; unas 5.500 lo siguieron desde afuera, por una pantalla gigante. La candidata a senadora por la provincia de Buenos Aires llegó al lugar y pasó entre el público antes de subir a un escenario en el que ya estaban parados todos los candidatos de la UC. Habló durante menos de cinco minutos y empezó a invitar a gente para que subiera al escenario, tal como hizo en Arsenal. Cada una de estas personas fue tomando el micrófono para contar los problemas que enfrenta por la política del gobierno, en particular por sus medidas económicas.

Datos blandos

En línea con el comienzo de la campaña oficial, el diario Página 12 entrevistó a nueve consultores, la mayoría de ellos responsables de encuestadoras, para saber cómo ven las perspectivas electorales de unos y otros en la provincia de Buenos Aires. Casi todos coinciden en que la participación en las PASO será bastante pareja en tres coaliciones: la UC de Fernández, Cambiemos de Macri y 1País de Sergio Massa y Margarita Stolbizer. Bastante por detrás quedaría el PJ con la candidatura de Randazzo. La provincia ha sido dominada por el kirchnerismo por varios años, pero en las últimas elecciones la victoria fue para Cambiemos, y Vidal fue electa gobernadora.

El escenario es otro en la ciudad de Buenos Aires, donde el oficialismo se hace muy fuerte, según una encuesta del Centro de Estudios de Opinión Pública de la que informa Página 12. Allí Cambiemos aparece primero, con la candidatura de Elisa Carrió, y lo sigue Unidad Porteña (UP), la coalición entre UC y el PJ. En UP, que allí sí tendrá elecciones internas, la victoria parece ser de Daniel Filmus, que fue ministro de Educación durante el gobierno de Néstor Kirchner. Pero fuera de UP, según el estudio –que coincide casi completamente con otro publicado por Infobae de la consultora Move Group–, Carrió tiene una intención de voto de 45% y Filmus de 19%.