La empresa Flurry posee una aplicación con la que hace un seguimiento del resto de las aplicaciones; toma nota del tiempo de uso, la cantidad de usuarios y el número de “sesiones” de más de un millón de teléfonos celulares, para realizar un compendio en el que comparte sus datos. Las sesiones son un parámetro específico de Flurry que abarca el período desde que una persona abre una aplicación duración de dichas sesiones varía y se analizan en detalle en sus estudios.

En 2017 Flurry registró un aumento promedio de 6% sobre 2016, lo que puede parecer una sorpresa si no fuera porque el aumento que tuvo 2016 en comparación a su antecesor había sido de 11%. Todo indica que el tiempo que los usuarios pasan delante de un celular va en aumento, pero esa misma suba está descendiendo. Lo que Flurry muestra es que el tiempo que una persona pasa frente a un smartphone es más o menos el mismo, un promedio de cinco horas, que tuvo como característica en de aplicaciones aun más grande.

El otro dato más relevante es que los usuarios han aumentado notoriamente el uso de cierto tipo de aplicaciones y han dejado de lado otros programas con el mismo nivel de intensidad. El rubro de las compras digitales notificó un aumento de 54%, lo que habla del éxito del e-commerce en el mundo; desde el Bitcoin hasta las billeteras digitales como Paypal, la cultura de la compra por internet parece ir esparciéndose año tras año. Por otra parte, el rubro de la música y el entretenimiento también tuvo una suba de 43%, lo que habla de un -cada vez escuchamos más canciones en el celular- como del digital -ya no las guardamos en una micro SD, las reproducimos por medio de aplicaciones-.

Las apps que están vinculadas al estilo de vida, la salud y generar un hábito en el usuario han visto un declive de 40%. Flurry menciona al respecto que quizás se deba mayormente a que estas aplicaciones fallan en su cometido. Por otro lado, los videojuegos en celulares han bajado 16%, aunque la empresa asegura que el dinero que las personas gastan dentro de los juegos está en el pico más alto jamás visto.