La Comisión de Vivienda, Territorio y Medioambiente de la Cámara de Diputados recibió el 3 de octubre a una delegación de tres vecinos de Los Palomares, Casavalle. Uno de ellos, Roberto Gómez, concejal vecinal del Centro Comunal Zonal 11, explicó que el motivo de la comparecencia era tratar de encontrar una solución al problema de “mucha gente que está quedando en la calle” y de “gente procesada por usurpación por un tema que viene desde hace muchos años”, explicó.

Gómez dijo que está de acuerdo con “combatir el narcotráfico”, pero “no a costa del sufrimiento de muchas personas que no tienen nada que ver con ese tema, las que hoy están siendo desalojadas por usurpación de vivienda y por hurto de luz y de agua”, según consta en la versión taquigráfica. El concejal vecinal sostuvo que hace 40 años que en Los Palomares “no se paga ni luz, ni agua, ni alquiler, ni impuestos, y ahora, de un día para el otro, atacamos fuertemente un barrio”.

Otra vecina planteó que había sido procesada por “usurpación y por hurto de agua y luz”, y que se encontraba sin vivienda. Según dijo, hace más de cuatro décadas que vive allí y “nunca se pagó nada”. “Pido una solución porque hay 500 casas y sólo a ocho personas las procesaron por hurto de luz y agua; a los demás les dieron casa y a nosotros no, y ninguno de los siete procesados tenía antecedentes; ahora tenemos uno”, señaló.

Ante estos testimonios, el diputado Eduardo Rubio, de Unidad Popular, dijo que si bien “hasta ahora tenía una versión de los hechos”, con la comparecencia de los vecinos tenía “otra distinta”. Por ese motivo, propuso que se coordinara una reunión con la alcaldesa del Municipio D, Sandra Nedov, para hablar con todas las “instituciones involucradas en este operativo” que se está realizando en Casavalle.

Gustavo Leal, director de Convivencia y Seguridad Ciudadana del Ministerio del Interior (MI), consultado sobre esto por la diaria, dijo que cuando el Parlamento cita a vecinos tiene que “tener claro” quiénes son. De las tres personas que concurrieron, indicó Leal, dos estaban procesadas por usurpación de vivienda, mientras que el concejal vecinal Gómez ya no vive en la zona, luego de que “vendió su casa en forma irregular”. Para Leal, es “increíble” que al final de la comparecencia Rubio haya destacado que esos vecinos tenían puntos de vista diferentes de los del MI: “Obvio que son diferentes, porque son personas procesadas por la Justicia, que habían firmado un acuerdo para no ir a prisión, aceptando un proceso abreviado”.

Según señaló, su “sorpresa” tiene un fundamento: “La Comisión de Vivienda recibe a una delegación de vecinos que reclaman viviendas, a los que llevó el diputado José Arocena, pero resulta que algunos de ellos eran usurpadores. Después los legisladores dicen que hay contradicciones, y obvio que hay contradicciones, porque las versiones que dan son de personas que cometieron un delito”, sentenció. Además, explicó que los legisladores, luego de que una de las personas manifestara que había sido procesada por usurpación, no le preguntaron “más nada”.

A Leal le parece extraño que ningún diputado se sorprendiera de lo que ocurrió en la comisión, porque la situación fue casi un blooper. Según explicó, actualmente hay una investigación en la Fiscalía que no ha culminado, y “las personas que estaban usurpando firmaron un acuerdo por el que se comprometen a no ingresar más a la zona, a devolver todas las pertenencias de la casa que utilizaron”, pero “resulta que después un diputado las invita como víctimas a la Comisión de Vivienda. Eso es increíble”. En su opinión, en el sistema político hay quienes se han “puesto en el lugar de los delincuentes”, y deben “hacerse cargo” de esto. Comentó que esa es una “forma penosa” de hacer política, y aseveró: “Nosotros estamos del lado de las víctimas”.

Arocena, por su parte, enfatizó que cuando los vecinos piden ser recibidos no se averigua sobre sus antecedentes. “Yo no le voy a pedir a nadie su prontuario. Nos pidieron una reunión y se la dimos”, enfatizó. Para el diputado, Leal tendría que “ocuparse de la seguridad” en vez de “venir a opinar sobre qué hacemos en la Comisión de Vivienda”. “¿Somos mandaderos de él? Es un disparate. Recién se dio cuenta del problema que tienen con los asentamientos, que hay bandas de narcotraficantes, que no se puede andar por la calle”, opinó, y aseguró: “He caminado estos barrios solo, y es difícil estar ahí”.

El legislador nacionalista contó que recorrió un liceo donde los estudiantes dibujaban revólveres, policías y helicópteros. “Leal debería preocuparse por esos chiquilines y la realidad que transmiten en esos dibujos”, manifestó. Según dijo, los vecinos “pidieron ser recibidos, a raíz de que habían sido desalojados de sus casas –ilegalmente ocupadas, de eso no cabe ningún tipo de duda, pero es una realidad que tiene 20 años–. El Estado recién se da cuenta de esto ahora”, insistió.