El ex jefe de seguridad de la Asociación Uruguaya de Fútbol (AUF) Miguel Zuluaga presentó la semana pasada una denuncia penal por difamación e injurias contra Richard Mariani, debido a que este señaló en numerosos medios de comunicación las responsabilidades de Zuluaga, durante la dictadura, en tareas policiales que fueron parte del terrorismo de Estado. Mariani, integrante del grupo Rebeldía Organizada, fue uno de los portavoces de la campaña “Hagámosle un gol a la impunidad”, para que Zuluaga fuera apartado de su cargo en la AUF. Madres y Familiares de Detenidos Desaparecidos publicó a su vez, el martes, un comunicado en el que recuerda que también fue parte de aquella campaña, junto con Rebeldía Organizada y unas 30 organizaciones sociales más, y reafirma la denuncia contra Zuluaga que se hizo pública “antes y después de presentarla a la AUF”. Agrega que esa denuncia fue debidamente fundamentada, y que las autoridades del fútbol la tuvieron en cuenta para decidir que el ex policía no viajara al Mundial de Rusia.

Familiares asevera que no mintió cuando dijo que Zuluaga “fue partícipe de las torturas”, porque su firma consta en actas de interrogatorios que se realizaron bajo tortura, y recalcan que la Justicia “debería laudar también penalmente en el caso”, al igual que “en más de 200 denuncias que a lo largo de más de 30 años” se han presentado por torturas, desapariciones forzadas y homicidios.

Por otra parte, reivindica la “denuncia ciudadana fundada y responsable” como una “alerta positiva para tomar conciencia” y agrega que la denuncia penal no es el único camino para dar a conocer la verdad. “Nos solidarizamos con Richard [Mariani], quien fue un firme y respetuoso vocero en los medios, junto a otros compañeros, sobre esta denuncia de la que participamos. Esperamos que todas las organizaciones seamos citadas para aclarar esta situación en la que la única responsabilidad es de Zuluaga y de la tardanza de la Justicia”, concluye el comunicado.