“La fotografía de esta semana fue la expresión más patente de la falta de autoridad y la inexistencia del Ministerio del Interior” (MI), dijo a la diaria el senador Javier García, sobre el motivo por el que impulsó la moción de censura del ministro Eduardo Bonomi, que apoyaron todos los partidos de oposición con representación en la cámara alta. García señaló que los hechos de esa fotografía empezaron el lunes en Artigas, donde se realizó el Consejo de Ministros, cuando Bonomi intentó tapar el cartel de una proclama de tabacaleros. “Fue ridículo, con su cuerpo tratando de cubrir un pasacalle, para después poner presa a la persona que levantó el pasacalle y escracharla públicamente, en una situación de abuso del poder”, indicó el senador blanco. También se refirió al “encubrimiento del asesinato de un preso” en la cárcel de Libertad, que el MI “divulgó como un ajuste de cuentas interno, a pesar de que estaba en conocimiento de que la realidad era otra”.

El otro hecho que desencadenó el pedido de la oposición es el que se dio el viernes, cuando un grupo de personas se manifestaron contra el G20, rompieron vidrieras y agredieron a periodistas en 18 de Julio. Para García, “la pasividad de la Policía, por orden del MI”, representó la “ausencia total del estado de derecho”. “En el primer caso, en el medio del campo, a 500 kilómetros de Montevideo, el ministro en segundos tiene los antecedentes de una persona; y el viernes, a dos cuadras del MI, destrozaron el Centro y no actuó. La verdad que es patético”, finalizó.

En tanto, el senador del Partido Independiente Pablo Mieres dijo a la diaria que “la sucesión de desastres del MI en la semana es más que suficiente para confirmar que en un país serio [Bonomi] se tendría que haber ido hace rato”. Agregó que la orden de no intervenir en los disturbios del viernes es “una omisión del deber en el cargo” y que “está en la tapa del libro que había que frenar los daños”.

Respecto de la moción, el senador frenteamplista Juan Castillo dijo que el oficialismo todavía no ha analizado el tema, aunque se animó a comentar: “Es el sano ejercicio democrático de la oposición de convocar a un ministro por semana”.